Asturias vivió ayer su primera jornada del año realmente otoñal, con lluvia y caídas de temperatura de hasta cinco grados. Y, tras varias semanas de magnífico tiempo, se hizo imprescindible el uso de paraguas e impermeables. Las altas temperaturas dicen adiós y la lluvia seguirá toda la semana, con los termómetros por debajo de los 10 grados. Incluso nevará en cotas relativamente bajas, a 1.100 metros, el martes.

"Yo no tenía ninguna gana de que llegara el otoño", aseguraban ayer Rosa María Álvarez y María Gión, equipadas con paraguas, por la lluvia intempestiva que hizo acto de presencia a la hora del vermú en Avilés. Tras una larga estación veraniega dieron, a regañadientes, la bienvenida al viento y al agua. "Eso sí, no nos costó encontrar los paraguas", indicaron. José Fernández hizo ver cómo el cambio de tiempo había sido de un momento a otro: "Por la mañana salí a caminar en mangas de camisa? y mira ahora", señaló. A "Bill", sin embargo, el agua no le afectó lo más mínimo. Este perro dálmata salió a disfrutar de las hojas caídas y a trotar por el avilesino parque del Muelle. "Llevaba sin salir de casa desde ayer y está tonto", justificaba su dueño, Ricardo Gelaz, intentando controlar la emoción del can. "Bill" lucía un abrigo de color rojo para evitar que el pelo se le quedara húmedo, porque el secador le resulta muy desagradable, pero es en lo único en lo que le afecta la llegada del mal tiempo. Tampoco Gelaz estaba preocupado. "Yo estoy encantado. Así no hay gente en el parque y puedo soltar al perro. Me pertrecho y salimos los dos", dijo.

"Ha sido un mes de octubre muy bueno, lo que no querríamos es que acabara, podía durar hasta el próximo agosto, pero tampoco nos podemos quejar. Puede que los del tiempo no acierten porque en realidad como no aciertan nunca no sabemos ya ni qué hacer. Lo que no era normal era ir a finales de octubre casi noviembre con manga corta y más de 20 grados", indicó la gijonesa Laura Fernández, de paseo con su pareja, Leonardo Márquez, y su bebe. Otra gijonesa, Sole Cabral, que se dio una vuelta por la ciudad con Francisco Prendes y su perra "Turca" se quejaba un poco del tiempo. "Tuvimos vacaciones en agosto y no hizo sol. Los meses más buenos fueron septiembre y junio, pero a pesar de todo aprovechamos ahora para ir con nuestra perra 'Turca' a la playa. Estos meses está permitido y hace bueno. Lo único malo es que no hemos cambiado la ropa del armario y nos va a pillar el frío todavía con cosas de verano", indicó.

Que el tiempo anda un poco loco lo reconoció también una vecina de Oviedo, Berta Gómez, que ha visto ya muchos otoños. "No hay quien entienda este tiempo. Antes el frío empezaba primero y llovía, no hacía este calor que ha hecho hasta ahora", indicó la mujer.