El verano de casi todos los récords del turismo en Asturias llevó al parque nacional de los Picos de Europa a cerrar agosto con 1,4 millones de visitas que elevan en un 10,4 por ciento la cifra de los ocho primeros meses del año pasado y refuerzan el liderazgo que en términos de atractivo turístico acapara la vertiente asturiana del espacio protegido. Casi seis de cada diez visitantes -815.000, un 57 por ciento- accedieron a los Picos por Asturias y dejaron para las "puertas" cántabra y leonesa un 34 y un 9 por ciento, respectivamente, de las entradas.

De la comparación con 2014 emerge un incremento del doce por ciento en las llegadas al parque a través de los Lagos y un progreso de un 10,5 en los accesos por Cabrales, por la ruta del Cares, el otro paso asturiano a través del que se contabilizan los ingresos de turistas a los Picos. La mejoría estadística, cocinada al ritmo de la recuperación de la capacidad de consumo y de la economía, comienza a amenazar los 1,8 millones de visitas con los que se cerró el ejercicio de 2014 en el parque. Era el recuento anual más voluminoso desde 2006 en el decano de los parques nacionales, el año pasado el tercero de España en número de visitas después de los del Teide, en Tenerife, y la Sierra de Guadarrama, que comparten Madrid y Castilla y León.

Los consejeros con competencias de Medio Ambiente de las tres comunidades autónomas implicadas en la administración del parque se congratularon ayer de un ascenso de las llegadas que, al decir de María Jesús Álvarez, titular de Desarrollo Rural y Recursos Naturales del Principado, "viene a consolidar la línea de recuperación de los visitantes en este espacio". Álvarez festejó el balance al final de la reunión ordinaria que la comisión de gestión del parque celebró ayer en Oviedo y en la que los tres gobiernos regionales y el Ministerio constituyeron la Comisión de Coordinación, la herramienta administrativa que la nueva ley de parques naturales exige a los espacios protegidos que como éste abarquen territorios supraautonómicos. El organismo contará con tres representantes del Estado y uno por cada una de las tres autonomías implicadas y en la reunión de constitución los tres consejeros y el director del organismo autónomo Parques Nacionales anunciaron ayer el primer movimiento hacia la redacción del Instrumento de Gestión Integrada (IGI). Debe ser, con arreglo a la normativa aprobada en diciembre, el sustituto del viejo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG), viejo y fracasado en el caso de los Picos, toda vez que la herramienta administrativa del Parque fue suspendida por sentencia del Tribunal Supremo en 2005.

Esta vez, con la necesidad de no repetir errores pasados, la tramitación se reinicia con la elaboración de "un documento previo de trabajo" y la expectativa de tener concluido el proceso a finales de año para comenzar a continuación su tramitación administrativa. El borrador del plan nace abierto, según aclaró ayer María Jesús Álvarez, a las "sugerencias de todos aquellos que puedan aportar algo". "Queremos hacer bien esa participación pública", enlazó, y construir a través del IGI "un marco de trabajo que nos permita armonizar los valores naturales del espacio con la actividad económica que se desarrolla en él". Es para ello que interesa, recalcó, que el documento se enriquezca incorporando "todas esas propuestas de todos los que tengan algo que decir: conservacionistas, municipios, operadores turísticos, ganaderos..."

La consejera asturiana, que compartió mesa con sus homólogos de Cantabria y Castilla y León, Jesús Oria y Juan Carlos Suárez-Quiñones, respectivamente, y con el director del organismo autónomo Parques Naturales, Basilio Rada, anunció además la elaboración de un proyecto en colaboración con la Consejería de Infraestructuras para proteger la carretera de acceso a Sotres (Cabrales) para protegerla de los aludes que causaron graves problemas durante la intensa temporada de nevadas del pasado invierno.