Myriam MANCISIDOR

Sizygia es el término que en astronomía se utiliza para definir la alineación del Sol, la Tierra y la Luna. Este fenómeno ocasiona cada año mareas vivas, en Asturias conocidas como mareonas. Y el mejor momento para disfrutar de este espectáculo -marea viva de conjunción- es ahora coincidiendo con la Luna nueva y la proximidad del equinoccio de otoño. Tanto es así que las playas ayer tenían un atractivo añadido para turistas y locales que, por unas horas y coincidiendo con la bajamar, pudieron recorrer los arenales descubriendo pedreros y cuevas otras veces ocultas por la mar. La pleamar, eso sí, generó el efecto contrario: las playas quedaron a merced del Cantábrico con las olas azotando los muros, sin espacio para estirar las toallas.

De acuerdo a la tabla de mareas, a las 04.12 horas fue la primera pleamar, que alcanzó cuatro metros con veintiún centímetros de altura, aunque la de la tarde, a las 16.28 horas, fue aún mayor: casi cuatro metros y medio. El efecto contrario fueron bajamares extraordinarias, más aún con un caluroso día: la primera marea baja se registró a las 10.13 horas con más de medio metro de altura y pasadas las diez y media de la noche la marea registró 0.44 metros de altura. Hoy las mareas vivas serán similares a la pleamar y bajamar.

Las mareas vivas son cada año, coincidiendo con San Agustín, un espectáculo para los bañistas asturianos que se sorprenden cuando a finales de agosto el agua tan pronto les deja disfrutar de imponentes arenales como les quita espacio para disfrutar de un día de playa. Otra fecha aconsejable para seguir las mareas de sizygia es en primavera -movimientos de oposición-, con la Luna Llena. Para la gente de mar las mareas vivas también un significado especial: «Cuanto más fuertes sean las mareas de San Agustín más lluvioso será el invierno». Para saber si se cumple o no el dicho popular habrá que esperar, pues, a que lleguen las primeras olas de frío a la región.

Los bañistas, entre tanto, tendrán que estar estos días más alerta que de costumbre de las mareas, para que sus toallas no las engulla el mar. Los amantes de la playa deberán a su vez estar pendientes de las tablas de mareas, para conocer a qué hora la bajamar les permitirá recorrer lugares otras veces tapados por la mar. Hoy la mejor hora para desplazarse a la playa será a las once menos diez de la mañana: bajamar.