Los argayos continúan produciéndose en la ladera de Pinos Altos, en Salinas. Los desprendimientos de tierra en el talud han obligado al Ayuntamiento de Castrillón a volver a cerrar un tramo de la calzada de la calle Juan Sitges como medida de precaución. Los desprendimientos se están produciendo a pocos metros de la zona recientemente reparada tras un argayo que se produjo el pasado mes de mayo.

"Hemos tomado precauciones y vallado parte de la calzada aunque retiramos la tierra, la red que hay al pie del talud está caída. En las próximas semanas repararemos la zona que creo que en este caso es de propiedad municipal", señaló ayer la alcaldesa de Castrillón, Ángela Vallina. La situación de inestabilidad de la ladera de Pinos Altos es palpable. "Esto se va a venir abajo en cualquier momento, es un peligro", sostienen los vecinos.

El pasado 5 de diciembre quedó abierta al tráfico totalmente la calle Juan Sitges tras un argayo que se produjo el 19 de mayo. Desde esa fecha y hasta el 28 de junio estuvo cerrado al tráfico el túnel de Arnao pero en el inicio de la temporada estival se valló, como ahora, la zona en la que había cedido la red de contención al pie del talud. Tras una larga polémica por la propiedad de los terrenos afectados por el desprendimiento entre la alcaldesa y Asturiana de Zinc (Azsa), finalmente la empresa financió los trabajos que costaron algo más de 56.000 euros. Las obras consistieron en la retirada de los materiales que argayaron por el talud de Pinos Altos y en la instalación de una malla de contención para evitar que, ante más desprendimientos, la tierra caiga a la calle Juan Sitges. Ahora habrá que realizar unos trabajos similares.