La ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local ha trastocado los planes en el Ayuntamiento de Gozón en lo que se refiere a la contratación de personal de salvamento playero para este verano. En años anteriores, el procedimiento ya hubiera sido concluido por estas fechas, pero el debate sobre las competencias de las administraciones ha retrasado su puesta en marcha. El alcalde, Ramón Artime, defiende que la tramitación ya está en marcha aunque aún afirma no conocer quién abonará los sueldos a los 38 socorristas que velarán por la seguridad en los arenales desde el 15 de junio al 15 de septiembre. "El Principado ha de responder a nuestras peticiones y ha de aclarar de una vez por todas si va a hacer frente al pago de esos salarios", señaló el regidor gozoniego.

Además, el Ayuntamiento ha enviado un escrito al Gobierno de España para que aclare qué competencias le corresponden a cada administración en lo que respecta al socorrismo, a los servicios sociales y al mantenimiento de los centros educativos. "Que estos servicios sean abonados por quién marque la ley", indicó Ramón Artime.

Los responsables del servicio de salvamento que trabajarán como funcionarios interinos saldrán de una bolsa de trabajo generada hace un par de años por el Consistorio, como ya ocurriera el pasado año. Los 38 socorristas se repartirán en cuatro playas de la siguiente manera: nueve trabajarán en Luanco, seis en Verdicio, tres en Bañugues y el resto en el arenal de Xagó.

El coste anual de este servicio ronda los 200.000 euros, que hasta el momento eran abonados por las arcas municipales. El Principado siempre aportó el 26 por ciento de esta partida, unos 47.500 euros, en concepto de subvención. A partir de ahora, el servicio se mantendrá pero no se conoce quién será el pagador de este montante. "Si aplicamos la ley, tiene que ser la administración regional", destacó Artime, que recordó además que si el Principado se hace cargo de todas las competencias impropias que desarrolla el Ayuntamiento, éste tendrá un ahorro de unos 700.000 euros anuales. Aún así, el Ayuntamiento destinará varios miles de euros en la puesta a punto de los arenales de cara a la temporada estival.