Un vecino de la localidad allerana de Piñeres resultó herido de gravedad el pasado jueves tras caer desde un árbol cuando estaba cortando leña en las inmediaciones de Grandes, a cuatro kilómetros de Castiello. Luis M. V., de 54 años y de origen peruano, fue hallado por vecinos de la zona después de permanecer horas tendido en un lugar de difícil acceso y sin poder moverse. En el momento del rescate sufría una tetraplejia grave. El Centro de Coordinación de Emergencias del 112-Asturias registró el suceso como un accidente laboral.
La víctima, según señalaron sus vecinos, realizaba labores de mantenimiento en las fincas de un abogado natural de la localidad de Piñeres. Luis M. V. es una persona muy apreciada en el pueblo y sus vecinos empezaron a echarlo en falta el jueves por la tarde. José Morán lo vio pasar por la mañana hacia unas fincas de la zona de Castiello. "Subía muy a menudo, y volvía a media tarde después de trabajar en los praos", explicó ayer Morán en las inmediaciones de su casa de El Pueblo, una localidad a seis kilómetros de distancia del lugar donde se produjo el trágico accidente.
Pero el jueves, Luis M. V. no regresó y Morán dio la voz de alarma: "Lo llamé al móvil, y no me lo cogía, así que empecé a preocuparme". Mientras tanto, en Piñeres, su mujer también estaba impaciente y fue al bar para preguntar si alguien lo había visto. Juan Carlos Gutiérrez, familiar de los propietarios del establecimiento, decidió subir al monte para terminar con la angustia de la mujer y de su hija, de 15 años. Lejos de conseguirlo, su hallazgo sembró aún más inquietud. Tras recorrer dos kilómetros con su coche, Gutiérrez sólo encontró la furgoneta de Luis M. V., aparcada al final de la pista de Castiello. Estaba oscureciendo, así que decidió llamar al bar de Piñeres para que los vecinos subieran y lo ayudaran a buscar al desaparecido.
El dispositivo de búsqueda se preparó rápido y participaron más de diez personas, entre ellas el abogado para el que trabaja el herido. José María Morán, hijo del vecino de El Pueblo, lo encontró a las once de la noche. "Enfocó con la linterna y lo vio tendido, como a veinte metros. Lo escuchó quejarse por lo bajo. Estaba sin fuerzas, pero seguía consciente", explicó José Morán. Dieron aviso al 112-Asturias, que respondió a la llamada movilizando a la UVI-móvil y a efectivos de Bomberos de Asturias del parque de Mieres. Los vecinos creen que Luis M. V. sufrió el accidente en la mañana del jueves, porque llevaba una bolsa con comida que nunca llegó a probar.
El rescate se alargó hasta las tres de la madrugada del viernes. El personal sanitario inmovilizó al herido y los Bomberos, ayudados por agentes de la Guardia Civil y vecinos, lo trasladaron en camilla hasta la UVI-móvil, que estaba en la pista de Castiello. Fue un recorrido de cuatro kilómetros, pero los vecinos lo recuerdan como eterno. Ahora, solo esperan por su mejoría, mientras sigue ingresado en la UVI del Hospital Central de Asturias. Al cierre de esta edición, permanecía estable pero con pronóstico grave.
