Los antiguos trabajadores de la farmacéutica Diasa Pharma, asentada en Turón (Mieres), han cobrado una parte de la deuda con la que cerró la empresa, en el año 2011. Los administradores concursales han abonado a los trabajadores una parte de la cuantía (que alcanza en algunos casos los 9.000 euros) y la plantilla espera cobrar el total del montante cuando se resuelva un proceso judicial abierto contra los gestores de la planta.

Diasa Pharma abrió sus puertas en 2004 y recibió ayudas de los fondos mineros para su puesta en marcha. En 2009, los empleados denunciaron que no estaban cobrando su salario y el socio mayoritario de la empresa, Manuel Adenso Iglesias, aseguró que se trataba de un problema puntual con Sadim, la filial de diversificación de Hunosa que participaba en el proyecto. Sin embargo, poco tiempo después, la empresa farmacéutica se declaró en concurso de acreedores.

La deuda con los operarios se generó durante los últimos meses de actividad, ya que la plantilla siguió trabajando para impedir el cierre y tratar de encontrar a un comprador. Ahora han cobrado una parte de la deuda tras tres años de reclamaciones.