El viejo cuartel de la Guardia Civil de Mieres ya tiene fecha de caducidad. El Ministerio del Interior ha aprobado la contratación de la obra de derribo del polémico inmueble. Fuentes ministeriales han confirmado que "en breve" se abrirá el periodo de licitación, con la posterior adjudicación de las labores. La cobertura presupuestaria asciende a 427.042 euros y la fecha fijada para el inicio de los trabajos es enero de 2016. Las labores se prolongarán durante mes y medio. Es decir, dentro de un año, el cuartel, desocupado desde 2011, habrá desaparecido.
La obra de derribo del cuartel de Mieres ya está a expensas de su adjudicación. El presidente del PP mierense, José Manuel Rodríguez, ha mantenido durante los últimos meses una permanente negociación con el Ministerio del Interior para agilizar un proyecto que se ha dilatado en el tiempo mucho más de lo previsto inicialmente: "Finalmente hemos recibido la confirmación de que la tramitación administrativa de las obras ya está en marcha", destacó Rodríguez. "Se trata de cumplir con un compromiso que en su momento adquirimos con los vecinos", añadió el dirigente local, que espera que en los próximos meses lleguen también buenas noticias sobre el desarrollo del nuevo cuartel: "La Guardia Civil hace un gran trabajo en el concejo y se merece tener las mejores instalaciones posibles".
El Ministerio de Interior clausuró el cuartel de la Guardia Civil de Mieres en enero del año 2011, cuando se detectaron graves problemas estructurales en el edificio que hacían imposible su habitabilidad. Los agentes fueron trasladados a unas instalaciones, en principio provisionales, que se adecuaron en el viejo ambulatorio Sur de Mieres, en la calle Alfonso Camín, justo al lado de la comisaría de Policía Nacional y el anterior Gobierno central, anunció entonces que las obras del nuevo acuartelamiento se iniciarían en 2012. Desde entonces, se han ido sucediendo una serie de anuncios de futuras obras que nunca llegaban. De forma paralela, el proyecto del cuartel también generó polémica con los vecinos, ya que el proyecto original no contentaba a muchos de ellos y se llegó a crear una plataforma contra el cuartel. Finalmente, el estudio fue modificado. La obra de derribo del cuartel de Mieres tiene una asignación económica específica, 427.000 euros, y unos plazos concretos de ejecución. Las obras, según Interior, arrancarán en enero de 2016 y deberán estar concluidas en marzo de ese año. A partir de ese momento, será el momento de abordar el desarrollo del nuevo equipamiento. Según la actual planificación, el futuro cuartel estará listo en 2018. Esas son las previsiones que maneja el PP tras mantener José Manuel Rodríguez una entrevista con el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. Para 2016 hay presupuestados 3,5 millones, que se completarán con otros 2,5 millones en 2017.
