Candás siempre se ha caracterizado por el cuidado de la imagen gráfica de sus festejos: la Sardina, el Cristo, el Salón de teatro costumbrista asturiano..., pudiéndose equiparar en este aspecto, según los expertos en diseño, a grandes ciudades asturianas como Oviedo y Gijón. Por eso no es de extrañar que le salgan imitadores en otros puntos de España. Como prueba de esa tradición gráfica, la villa conserva un extenso archivo de obras que recogen, por medio de dibujos, la historia de Candás. Cada cartel ha sabido reflejar a su manera las costumbres propias de su época y también las tendencias de un sector que anda inmerso en constantes cambios de colores, tipografías y estilos.

Un gran conocedor de este mundo es Daniel Durán, de la empresa candasina Igrafix y autor del diseño de las fiestas del Santísimo Cristo 2009, que plagió, el pasado mes, el joven Samuel González Porras, ganador del concurso de carteles de la feria de la Virgen de Riánsares de la localidad conquense de Tarancón. "Ese año quería representar a las peñas marineras a través de una joven, porque el Cristo siempre fue una celebración más íntima, más del pueblo que la de San Félix, a la que solemos representar con un carácter más amplio", explica Durán.

De esta forma, tanto en el anuncio original como en la copia conquense se utiliza a una mujer en primer plano, siguiendo un estilo similar al del cómic. Sin embargo, el diseño de Tarancón no responde a las últimas tendencias en cartelería. Cada año se ponen de moda nuevas técnicas de dibujo, que van sustituyendo a las anteriores. En este sentido, Daniel Durán manifiesta que lo que se lleva ahora "son los anuncios basados en la tipografía, en los que el dibujo no es lo principal sino que sirve de acompañamiento a las letras". Justamente la línea que se siguió para representar las fiestas del Cristo de este año.

Y es que este candasín y su mujer, Miriam Suárez, llevan más de diez años dedicados a la elaboración de carteles para Carreño. Todos los años realizan los diseños de las fiestas del Cristo y del Festival de la Sardina, de la Banda de Música, del Grupo de baile San Félix y de todos los eventos que promueve el Teatro Prendes. Ellos son, pues, los encargados de plasmar sobre el papel la transformación que va experimentando Candás año tras año.

Por sus manos han pasado, así, carteles tan emblemáticos como aquel que reflejaba al pueblo candasín con la representación, en miniatura, de sus vecinos más conocidos o aquel otro en el que aparecía el cuerpo de una mujer, con flores en el regazo. Aun así, ni Durán ni Suárez pensaron que uno de sus diseños llegaría algún día a ilustrar unas fiestas en Tarancón, pero así ha sido. Y más que con el plagio, estos diseñadores locales se quedan con el hecho, de que gracias a uno de sus dibujos, Candás es, hoy, famosa hasta en Cuenca.