"Ya estuvo bien de fuegos, ¿no?". Esta fue la reacción de uno de los muchos curiosos que ayer se acercó a una nave del polígono Natalio de Granda para seguir las labores de extinción de un incendio que puso los nervios a flor de piel a más de uno. Cinco días después del trágico incendio en el que perdió la vida el bombero sierense Eloy Palacio, diez de sus compañeros de los parques de La Morgal y San Martín del Rey Aurelio, ayudados por nada menos que cinco vehículos, extinguieron en tiempo récord unas llamas que, por suerte, no provocaron daños personales graves.

Apenas fueron 90 los minutos que los profesionales precisaron para extinguir un fuego del que se alertó a la una de la tarde desde una nave anexa, cuyas obras de adecuación podrían haber sido causantes el origen de las llamas. "Pudo haber sido mucho peor, pero al final quedó prácticamente en nada", comentó una de las primeras personas que se acercó al lugar tras ser alertada de la existencia del incendio.

Si bien no hubo que lamentar consecuencias importantes, sí es cierto que hubo que atender a tres personas, entre ellas a dos mujeres que tuvieron que ser trasladadas al hospital tras inhalar humo. En la nave tiene su sede una empresa de desatascos, cuyos seis trabajadores se encontraban en aquel momento fuera de las instalaciones. "Únicamente tragamos un poco de humo", comentó al llegar al lugar de los hechos uno de los trabajadores, que también movilizaron a agentes de la Guardia Civil y la Policía Local.

Un balance al que hay que añadir importantes daños materiales como la calcinación de una furgoneta y un remolque, así como parte de la instalación. "Eso al menos tiene remedio", se consolaron los presentes.