El Mercado de Ganado de Pola de Siero registró ayer una jornada atípica por la fiesta regional, con una reducción de la afluencia de reses (hasta sumar 1.346 cabezas) y registrándose lentitud en las transacciones. Entre los operadores se constató además la preocupación por la entrada de ganado foráneo en todo el territorio nacional, procedente de otros países europeos, cuyos precios suponen una fuerte competencia para los ganaderos nacionales, informa F.T.