Entre las innumerables solicitudes que llegan a la Federación Española de Fútbol para contar con Vicente del Bosque, el seleccionador español tiene muy en cuenta aquellas que tienen fines solidarios o educativas, en las que participan niños o personas con discapacidad. Requisitos que cumple el Foro Comunicación y Escuela, que organiza el Departamento de Lengua Castellana del Instituto de Educación Secundaria Elisa y Luis Villamil de Vegadeo. Rodeado de niños, Del Bosque dio una nueva muestra de su talante integrador, de esa forma de ser que ayudó mucho a que el fútbol español lograse hace un año su primer Mundial.

Acompañado por la jefa de prensa de la Federación, Paloma Antoranz, Del Bosque cumplió el compromiso que se vio obligado a posponer en mayo, cuando estaba prevista su participación en el III Foro Comunicación y Escuela de Vegadeo. El acto central consistió en una charla coloquio en el recinto ferial, arropado por alumnos de la ESO, los de cuarto, quinto y sexto de Primaria del Colegio Jovellanos, los del Colegio Edes de Educación Especial, además de los colegios de Castropol y Taramundi. Tras un preámbulo de los periodistas Ángel Rodríguez (presentador del programa «Al primer toque» de Onda Cero) y Moncho Viña (Radio Nacional), Del Bosque enhebró un discurso tan didáctico como cariñoso, dirigido a los niños.

«Sois unos afortunados por vivir en este país», espetó Del Bosque, toda una declaración de intenciones en estos momentos de declaraciones tremendistas sobre España. El seleccionador se refería, por supuesto, al ámbito que le compete y mejor conoce, el del fútbol. Y lo justificó con datos: «Hay 204 federaciones afiliadas a la FIFA y 32 que empezaron el Mundial. Sólo podía ganar una y fue España». El técnico pide que se valore ese primer título de la Historia, aunque reconoce: «Para ser campeones también hay que tener suerte. Si aquel balón no roza en la bota de Casillas, o el remate de Villa frente a Paraguay no entra, tras pegar en los dos postes, todo habría sido diferente».

Consciente de que los futbolistas son modelos de comportamiento para muchos niños, Del Bosque pidió a los de Vegadeo que se fijasen en los suyos: «Los chavales que nos representaron en el Mundial son buenos ejemplos para vosotros». Además de buenos jugadores, Del Bosque presume de estar al frente de un grupo que tiene muy claro cuál es el objetivo: «Antes los jugadores españoles eran buenos individualmente. Ahora somos buenos en equipo porque han cambiado de mentalidad».

Vicente del Bosque, que tiene un hijo con síndrome de Down, envió un mensaje muy especial para los alumnos de Edes. «El fútbol es salud e integración. Chavales como vosotros podéis beneficiaros de eso». Precisamente uno de ellos realizó una de las preguntas más celebradas en el posterior coloquio, cuando se interesó por la reacción de la esposa de Del Bosque a las numerosas ausencias del seleccionador por sus compromisos profesionales: «Ella entiende perfectamente que es mi trabajo y siempre me ha apoyado».

No obstante, la mayoría de las preguntas de los niños fueron dirigidas a aspectos futbolísticos y, por supuesto, a lo ocurrido el año pasado en Sudáfrica. De esa experiencia extrajo Del Bosque el momento más difícil de su carrera deportiva: «La derrota frente a Suiza en el primer partido del Mundial. No sé si fue el peor, pero sí el de mayor desazón. Sentí un dolor interno muy grande porque habíamos llegado con muchas expectativas y podíamos defraudar a mucha gente».