El Marino vuelve a entrenarsw el Miramar. El club anunció ayer que a partir de esta misma semana los entrenamientos de los miércoles y los jueves se realizarán en el campo luanquín dado que ya empieza el buen tiempo y el césped está en buenas condiciones. Los sábados y los lunes se mantienen los entrenamientos en el sintético de Balbín dado que son dos sesiones de trabajo suave antes y después de los partidos.

La noticia es muy buena para la plantilla porque el Marino siempre mejora cuando puede entrenar en el campo de hierba natural. El equipo entrenaba en el Tragamón (Gijón) con José Luis Quirós en el banquillo, pero también es de hierba artificial, al igual que el anexo de La Mata (Candás) donde los luanquinos entrenaron esta temporada desde el pasado mes de noviembre.

El técnico, Adolfo Pulgar, recibió con alegría el cambio de escenario de trabajo. "Llevamos dos semanas mirando el tiempo para pedir el cambio al presidente porque los jugadores no se atreven a ser intensos en Balbín. Aquel césped es como una carretera de duro y hay mucho temor a las lesiones, sobre todo en los jugadores más propensos a tener problemas musculares", señaló.

La vuelta a Miramar no es definitiva puesto que el equipo volverá a Balbín los días de mucha lluvia, aunque Pulgar aclara que "no es lo mismo" ir de vez en cuando que todos los días".

Asamblea extraordinaria. El club convoca a los socios esta tarde (19.30 horas) a una asamblea general extraordinaria que se celebrará en el campo de Miramar con el único punto en el orden del día de preparar las elecciones a la presidencia. El actual presidente, Luis Gallego, ya anunció que se presentará a la reelección.