Oviedo / Madrid / Alicante,

J. C. / M. M / D. N.

La representación empresarial de las cuatro cajas de ahorros Cajastur-CCM, CAM, Caja Extremadura y Caja Cantabria que han decidido integrarse en una fusión virtual para constituir el quinto grupo financiero más relevante del país, con 13.000 empleos, confirmaron ayer en Madrid a los sindicatos la necesidad de hacer ajustes laborales en el futuro grupo. No los cuantificaron, aunque aseguraron que las reducciones de plantilla se realizarán con procedimientos no traumáticos, que tampoco llegaron a precisar, informaron fuentes sindicales.

Las partes, reunidas ayer en un hotel de Madrid para constituir la mesa de negociación que deberá pactar el plan laboral del futuro grupo financiero, no entraron en más contenidos, que se empezarán a abordar previsiblemente el jueves. «No se nos hicieron aún propuestas concretas ni se nos han entregado informes. Fue una reunión sólo constitutiva», declaró uno de los participantes.

Algunos representantes sindicales expresaron su preocupación por el futuro ajuste laboral y mostraron su reticencia a que pueda llegarse a un acuerdo laboral antes de la celebración de las asambleas generales de Cajastur, CAM, Caja Extremadura y Caja Cantabria, en las que tomarán parte los representantes de los trabajadores, y en las que deberán ratificarse los acuerdos de fusión virtual aprobados ya por los consejos de administración. En el sector se da por hecho que la media del ajuste laboral en las cajas que se fusionan podría situarse cerca del 15%, aunque la unión fría que lidera Cajastur podría requerir un menor recorte por la existencia de menos redundancias en su red.

Por parte sindical, CC OO y UGT contarán con 5 representantes cada uno en la mesa de negociación; el sindicato independiente SICAM (mayoritario en CAM) y otros afines a esta organización (caso de Apecasyc, de Caja Cantabria) tendrán 4; CGT, 3; CSICA, 2; CSIF, 1 y un grupo de pequeños sindicatos, otro. Este último colectivo, que suma una representación del 4,8%, está integrado por los sindicatos Alta, Nuevas Generaciones y Sindicato Vietnamita (todos, de CAM), el Sindicato de Cuadros de Caja Extremadura y los cuadro delegados de Cajastur en Madrid, que integran una alianza de CC OO, UGT y CSICA.

SICAM, CGT y otros sindicatos (todos ellos con elevada presencia en CAM) no firmaron el acta de constitución de la mesa y anunciaron que la recurrirán. Estas organizaciones exigían que la representación fuese proporcional al peso de cada caja, lo que les daría una posición más elevada en virtud de su relevancia en CAM, la mayor de las cajas participantes. También se opusieron a que estuvieran representados los trabajadores de CCM, filial de Cajastur. El resto de organizaciones se negaron y la representación sindical se plasmó de forma proporcional a la representatividad de cada central en el conjunto del grupo.