La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, se declara en "mejor forma que el presidente", Barack Obama, en una entrevista concedida a la revista "Better Homes and Gardens".

"Siempre me burlo de él y le digo que estoy en mejor forma, pero yo puedo entrenar más tiempo, él es el presidente", bromeó.

La primera dama, que ha lanzado una campaña para la lucha contra la obesidad infantil, confesó que lo que le "abrió los ojos" fue un chequeo rutinario que el pediatra hizo a sus hijas que puso en evidencia que su vida en Washington no iba por el camino más saludable.

Michelle Obama, que desde su llegada a la Casa Blanca ha promovido iniciativas como la creación de una huerta en los jardines presidenciales, comenzó a darse cuenta de que algunas prendas le quedaban más estrechas, así que decidió pasar más tiempo en el gimnasio, y le ha merecido la pena, según relató en la entrevista.

El cambio que hizo en su familia para llevar una vida más saludable fue la inspiración para comenzar la campaña Let's Move!, con la que promueve un estilo de vida que sea "agradable y divertido".

"La diversión es una parte que está olvidada en todo esto, pero cuando estábamos creciendo no hacíamos ejercicio, sino que jugábamos al escondite o saltábamos a la comba", subrayó.

Lo cierto es que, en mejor forma o no que el presidente, los consejos de la primera dama están teniendo un gran impacto en EEUU, y, según ella misma ha podido comprobar, también en la Casa Blanca.

Sin embargo, Obama, que no oculta su pasión por las hamburguesas, celebró el pasado 3 de agosto el final de las largas negociaciones sobre el techo de la deuda invitando a su equipo al restaurante Good Stuff, una concurrida hamburguesería cercana al Capitolio.

El presidente suele aprovechar sus salidas fuera de Washington para satisfacer su gusto por las hamburguesas y los perritos calientes, aunque cuando "peca" suele bromear que "no se lo cuenten a Michelle".