El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Gijón, José María Pérez, se reunió ayer con seis miembros del comité de empresa de Agalsa, galvanizadora gijonesa que se encuentra en preconcurso de acreedores. Son 150 los trabajadores que se encuentran afectados por esta situación, pertenecientes a tres sociedades distintas pero todas ellas bajo una única propiedad.

La empresa, adeuda a día de hoy 2 meses de sueldo a sus trabajadores, pero "esa no es nuestra mayor preocupación, sino que lo que realmente nos inquieta es que el día 14 terminan los plazos del preconcurso", por lo que, de no solucionarse la situación, la empresa incurría en un concurso de acreedores, lo que "pondría en entredicho su futuro y, con ello, el nuestro", como aseveró tras la reunión David Castillo, presidente del comité.

La empresa, que en los últimos meses tuvo una alta actividad, hasta el punto de tener que contratar a trabajadores externos para que complementasen la labor de sus empleados, achaca sus problemas económicos a una "mala gestión", arrastrada desde la compra de unos terrenos limítrofes con la factoría, "deuda que impide a las entidades bancarias concederles más crédito", afirma Castillo.

"Esta es una semana clave", explicita el representante de los trabajadores, razón por la cual "vamos a convocar una manifestación el miércoles frente al ayuntamiento" con el fin de dar visibilidad a la causa.

Por su parte, Pérez, reafirmó su "solidaridad y compromiso total" con los trabajadores. Una implicación que plasmó en la reunión, donde "analizamos la situación para ver en qué aspectos podíamos ayudar", sobre todo en cuanto a "hacer un seguimiento de la situación y ver los mecanismos de ayudad que podemos poner en marcha para actuar de forma efectiva", sentenció el edil socialista.

Sin embargo, para Pérez, "la responsabilidad total ha de recaer sobre la empresa, que será la que tenga que buscar soluciones a la situación tan dramática que vive", finalizó.