La multinacional General Dynamics, propietaria de la Fábrica de Armas de Trubia, ha presentado en una feria de Londres su último blindado, un prototipo que aspira a ser el vehículo del Ejército británico. La noticia de la presentación, que fue difundida por la prensa especializada, ha suscitado la indignación de algunos de los 55 trabajadores despedidos de la factoría ovetense, que consideran que «el alarde» de General Dynamics en Londres muestra «la ingeniería financiera» de la multinacional para justificar el expediente de regulación de empleo que afectó a los trabajadores ovetenses. «Ésta es la empresa que despidió a 55 trabajadores, que prejubiló en condiciones lamentables a otros 250 y que gestiona a la planta de Trubia, la misma que fabricó probablemente este prototipo que ahora presenta a los cuatro vientos. Ingeniaría financiera de primer orden», sostiene uno de los trabajadores despedidos, que asegura que lo que pretenden es que se les apliquen «las mismas condiciones que al resto de los trabajadores que abandonaron la empresa», en referencia a las prejubilaciones.

El colectivo de despedidos, arropados por parte de la plantilla, iniciaron la pasada semana nuevas movilizaciones, con una concentración y un corte de carretera al mediodía a las puertas de la factoría trubieca.