La Policía Nacional le muestra a Oviedo el poderío de dos siglos de historia: a caballo, con drones o desactivando explosivos

El Cuerpo abarrota la calle Uría, donde simula sus actuaciones ante distintos escenarios delictivos

La Policía Nacional, premiada con la Medalla de Oro de Oviedo, se ganó ayer aún más el cariño de los ovetenses. Centenares de personas abarrotaron el final de la calle Uría, a la altura de la plaza de la Escandalera, para presenciar una exhibición de efectivos del cuerpo, que celebra este año su 200.º aniversario. Coches y motos de Policía, perros, caballos y hasta drones protagonizaron una jornada que supuso el colofón final a la Feria de la Ascensión. Los niños fueron los más efusivos con las diferentes actuaciones policiales, que simularon en el corazón de Oviedo cómo actúan ante varios escenarios delictivos. "De mayor quiero ser policía para pillar así a los malos", repetían los pequeños tras la valla protectora.

A la exhibición asistieron la delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa; el jefe superior de la Policía en Asturias, Luis Carlos Espino, y el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli. Junto al regidor estuvieron todos los concejales de su gobierno, incluido el de Seguridad Ciudadana, José Ramón Prado. Con la puntualidad que requieren los agentes en todas sus actuaciones, el acto comenzó a las doce en punto de la mañana. Los primeros en comparecer en una calle Uría cortada fueron los mejores amigos del hombre, que lo son también de la Policía. Los perros "Fito", "Mía" y "Bruma" detectaron en directo drogas y explosivos.

"Para ellos es un juego. Para nosotros son un compañero más que responde ante cualquier situación", explicaron los agentes. Una vez controlados los supuestos explosivos que contenía una caja, fue el turno del grupo policial que se encarga de ellos, los TEDAX, que el año que viene cumple 50 años. Al grito de "fuego, fuego, fuego", los agentes intervinieron a distancia con un disparo que retumbó en todo el centro de Oviedo. Una vez rota la caja y desparramado su contenido, desactivaron el explosivo ante el asombro de los presentes.

Tras recordar a los compañeros fallecidos en acto de servicio, salieron a escena las motos al ritmo de "Guns N’Roses". La UPR, encargada de altercados de orden público de baja intensidad y la UIP, de sucesos medios o graves, mostraron cómo resuelven momentos de máxima tensión en pocos segundos. El público aclamó las detenciones sobre dos ruedas de los supuestos delincuentes que habían cometido un atraco en Pumarín. Ante los disparos (con balas de fogueo), entre el público alguno se vio tentado a "echar cuerpo a tierra". Por último, el equipo de caballería, con seis animales, realizó ejercicios de equitación antes de cerrar la demostración atrapando a un "carterista" que tenía la feliz idea de darse a la fuga en plena calle Uría.