Con más precauciones que las de la temporada pasada, el Oviedo cifró en 20.000 su objetivo de socios para la presente campaña. No fue Arturo Elías en esta ocasión el que lanzó el reto por las redes sociales, sino David Alonso Mata, gerente de la entidad, el que lo hizo en la presentación de una campaña que se demoró más que en otras ocasiones. El listón de la pasada campaña estaba muy alto, los 20.343 son el techo histórico de la entidad carbayona, y el efecto efervescente del ascenso se había atenuado. Por eso, el club optó por mantener los precios y lanzar algunas iniciativas para fomentar la llegada al Tartiere de nuevos abonados. Aunque a la campaña le costó coger el ritmo, ha ido enderezando su marcha en los últimos tiempos. Ayer, el Oviedo dio el último dato del recuento: el club azul ya cuenta con 17.500 socios.

Una de las cifras que llaman la atención es el de nuevas altas. Hasta la fecha son 2.132 los seguidores que se han estrenado esta campaña como socios, acogiéndose a los beneficios anunciados por el club para fomentar la entrada de nuevos seguidores. El club aplicó un descuento del 20% sobre el precio del abono para aquellos socios que cumplieran dos requisitos: renovar su carné antes del pasado 20 de agosto y llevar con él a un no abonado que decidiera unirse. Este otro seguidor también se beneficiaba de la rebaja en el precio. Negocio redondo para los dos.

Los más de 2.000 nuevas altas es una cifra notable. La temporada pasada fueron más los que se unieron al Tartiere pero se trataba de una campaña especial, de récord histórico por significar el regreso del club al fútbol profesional después de una larga etapa. Basta un ejemplo para comprobar el efecto contagio: el 25 de agosto de 2015, cuando se habían superado los 18.000 socios, se contaba ya con 4.775 nuevas altas. Dejando esa campaña de lado, los números sí son buenos. Si se compara con hace dos años, por ejemplo, la cifra es importante. En la 2014/15, cuando el club alcanzó a finales de agosto los 12.177 abonados, las nuevas altas se situaban en el 10%. Ahora, el porcentaje de nuevos se eleva hasta el 12,2%.

Pero la llegada de seguidores al Tartiere también deja otra reflexión en el aire, la pérdida de abonados respecto a la última campaña. Descontando las nuevas altas, hasta la fecha son 15.368 aficionados los que han decidido renovar su vinculación de los 20.343 totales del pasado curso. Es decir, hay 4.975 socios de la temporada pasada que aún no han dado el paso.

El objetivo de los 20.000 abonados parece aún algo lejano, aunque el ritmo incrementado en las últimas semanas hace que aún se mantengan ciertas esperanzas de lograrlo. Cada temporada suele haber un punto de inflexión que despierta al aficionado y el de este año parece claro que se produjo con el fichaje de Michu, el hombre de la casa que tanto entusiasma al seguidor. Con el inicio de la campaña de captación en números lejanos a los de la temporada anterior, el anuncio de la llegada del asturiano hizo que los abonos repuntaran. Ahora, el club espera que en septiembre se produzca otro empujón en el apoyo popular.

El acelerón ha sido especialmente marcado en las dos últimas semanas. El pasado 28 de agosto se llevaban 16.500 abonados y en tan solo dos semanas, la masa social se ha incrementado en 1.000 seguidores. El regreso de las vacaciones y la disputa del segundo partido en el Carlos Tartiere han ayudado al crecimiento. Una mejoría en la marcha del equipo (es ahora 12ª a un punto del play-off y a dos del ascenso directo) ayudaría a que el objetivo de los 20.000 abonados estuviera aún más cerca.