Cádiz,

Nacho AZPARREN

enviado especial de

LA NUEVA ESPAÑA

Fernando Hierro afronta la rueda de prensa con gesto de alivio. El mismo que siente al mirar a la tabla. Después de mes y medio de competición aún es pronto para sacar conclusiones pero la situación clasificatoria amenazaba con crear más ansiedad. Hierro sigue sin fijarse con detenimiento en la tabla, pero la victoria sí le da razones para creer en la mejora del equipo. "Esto es una carrera de fondo, ya lo he dicho en otras ocasiones, pero el resultado nos viene bien sobre todo para ganar confianza", señaló el técnico minutos después de firmar su primera victoria fuera de casa como entrenador.

Para el preparador, la clave estuvo en el planteamiento del equipo azul. "Sabíamos que el Cádiz en su campo es un equipo peligroso, que busca las bandas y que hace daño desde los extremos. Por eso jugamos con tres centrocampistas por dentro, para ayudar a los laterales en esas situaciones", reveló Hierro para quien los tres puntos tienen efectos directos en la moral del grupo: "Necesitábamos un partido así. El resultado nos viene bien para reforzar lo que trabajamos y para que veamos que lo que ensayamos tiene rendimientos. Me hubiese gustado que en la segunda parte hubiésemos tenido más posesión y tranquilidad y no buscar el último pase tan rápido, pero me voy satisfecho". La situación en la tabla mejora y el entrenador saca conclusiones positivas de los cambios en el equipo. "La pretemporada se utilizó para ver cosas: Algunos días jugamos con una línea de cinco atrás, otros con un 4-4-2, en otras ocasiones con tres en el medio? No cambia la forma de actuar, pero tengo la riqueza que me da la plantilla para cambiar de sistema".