El Oviedo perdió ayer en Vallecas una buena oportunidad de dar un golpe encima de la mesa. Habían caído Tenerife y Getafe, dos de sus rivales directos, y también el Girona, próximo en visitar el Tartiere. La derrota impidió a los azules acercarse a los catalanes antes del duelo entre ambos y colocarse cuartos, siguiendo la estela del Cádiz, así que se quedó en la plaza que tenía garantizada: la quinta. El equipo de Fernando Hierro (46 puntos) no se movió de su posición en la clasificación, pero sí perdió tres puntos de colchón con respecto al séptimo, que hoy es el Huesca (43), a quien todavía tiene que recibir en el Tartiere. En mitad de los dos equipos, sexto, está el Getafe, que suma 44. La tabla vuelve a dar señas de querer apretarse por la zona alta a falta de doce jornadas para el final.
En el club azul se habla abiertamente de que el objetivo es entrar en el play-off a final de temporada y, desde esa perspectiva, la jornada no resultó propicia para los azules, porque los seis puntos que había de brecha antes de esta jornada se quedaron ayer en la mitad, tres. O lo que es lo mismo, un partido. Sucede también que el Huesca, que hoy es el primer candidato a desbancar a alguien del play-off, derrotó 4-0 a los azules en la primera vuelta, resultado difícil de igualar pensando en el gol-average. Por arriba, el Levante mantiene ritmo de crucero. Un dato que habla del impresionante ritmo de los de Muñiz: el Oviedo está más cerca del colista Mirandés (29 puntos) que del líder (68 puntos). Los azules tienen a 12 al Girona (58 puntos) y a cuatro al Cádiz (tercero, con 50 puntos).
Derrota del juvenil. Por otra parte, el juvenil de División de Honor perdió ayer ante el Roces (0-2) y se aleja de los puestos altos de la clasificación.
