El entrenador del Oviedo, Juan Antonio Anquela, se plantea volver a recuperar el sistema de tres centrales y dos carrileros para el partido del domingo frente al Lorca, equipo ya descendido a Segunda B. El técnico jienense ha ensayado esta mañana, en el entrenamiento del equipo en El Requexón, con el dibujo con el que el Oviedo atravesó la mejor racha de la temporada y llegó a acariciar los puestos de ascenso directo.

El Oviedo lleva un mes consecutivo con defensa de cuatro con resultados dispares: dos victorias (en Lugo y ante el Nástic) y dos derrotas (Valladolid y Numancia). La mala imagen de estos dos últimos partidos, que han desilusionado especialmente al oviedismo por la oportunidad que suponían para meterse y afianzarse en el play-off, pueden precipitar el nuevo cambio de sistema, que daría de nuevo encaje a Mossa y a Diegui en los carriles y, seguramente, dejaría otra vez a Fabbrini en el banquillo. El italiano ya no fue de la partida en Los Pajaritos.

La recuperación de Forlín, de vuelta tras cumplir ciclo de tarjetas amarillas, le asegura un puesto en el once inicial. Bien de líbero, en el sistema de tres centrales y dos carrileros, bien de central, si Anquela opta por mantener la defensa de cuatro.

"Nos adaptamos al partido. Trabajamos los dos sistemas todas las semanas", ha señalado esta mañana Forlín tras el entrenamiento.