La firma norteamericana Ion Torrent ultima una máquina capaz de leer el genoma completo de una persona más rápidamente y de forma más barata que los métodos existentes. La compañía, con sede en Connecticut (EE UU), asegura que la máquina puede trazar el mapa de un genoma completo en un solo día por la módica suma de 1.000 dólares. Los corresponsales afirman que las perspectivas de un uso mayor de esta tecnología -establecer el mapa genético de recién nacidos, por ejemplo- plantea problemas éticos respecto a la utilización de la información. El conocimiento del mapa genético en tiempo real o al menos de forma rápida y barata abre la puerta a establecer terapias de forma masiva y de gran alcance. El procedimiento implica reemplazar, manipular o suplementar los genes no funcionales con genes funcionales. En esencia, la terapia génica es la introducción de genes en el ADN de una persona para tratar enfermedades. Para eso será necesario disponer de fármacos a medida del enfermo.