Oviedo, Madrid

E. G. / Agencias

Asturias es la cuarta comunidad autónoma con una estancia media en hospitales más prolongada, con 7,4 días, por detrás de Castilla y León (7,57), Galicia (7,52 días) y Cantabria (7,5), y siete décimas por encima de la media nacional, que es de 6,7 días, según se recoge en la «Encuesta de morbilidad hospitalaria» de 2011, que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE). Influye en la estancia media el envejecimiento de la población.

Por el contrario, las que presentaron la estancia media más reducida fueron la ciudad autónoma de Melilla (5,40 días), la Comunidad Valenciana (5,54 días) y la ciudad autónoma de Ceuta (5,62 días).

La tasa de altas por 100.000 habitantes se situó en Asturias en 11.317 frente a 10.246 de media nacional, una cifra que supone un 1,1% menos que en 2010. Según indica el INE, esto se debió, fundamentalmente, a la disminución de los episodios de embarazo y parto por tercer año consecutivo.

La crisis afecta a los niveles de natalidad de tal forma que se nota significativamente en las estadísticas, tanto nacionales como regionales. En el año 2011 se produjeron 4.670.687 altas, un 1,1% menos que en 2010 (4.720.545).

Las «dos Españas», sanitariamente hablando, se notan en los grandes números. Por grupos de enfermedades, los episodios de embarazo, parto y puerperio causaron, por ejemplo, la mayor tasa de altas hospitalarias en Andalucía, Madrid, Murcia y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, en parte motivado por la alta tasa de población inmigrante.

En Asturias, junto a otras diez comunidades, el mayor número de altas hospitalarias está relacionado con las enfermedades del grupo del aparato circulatorio. Algunas excepciones: en Baleares y Castilla-La Mancha el primer lugar en altas producidas correspondió al grupo de las enfermedades del aparato respiratorio, mientras que en Navarra el primer puesto lo ocuparon las enfermedades del aparato digestivo.

Las estadísticas del INE inciden en el muy diferente peso de la sanidad privada entre las comunidades autónomas. Una de ellas, Cataluña, presentaba ya en 2011 una mayoría de ingresos hospitalarias en centros privados; concretamente, el 52,4% sobre el total. Tras Cataluña se sitúan Baleares (38,6%) y Madrid (33,7%). La distribución del número de altas por tipo de hospital es mayor en la red pública (73%) que en la privada (27%).

Las comunidades con menor presencia de altas hospitalarias en la red privada (excluyendo las ciudades autónomas) fueron Castilla-La Mancha (5,4% de altas en hospitales privados), Extremadura (6,8%) y La Rioja (10,4%). El resto, de mayor a menor uso de la sanidad privada, lo conforman Canarias (33%), Navarra (24%), Galicia (22%), Andalucía (22%), Comunidad Valenciana (20%), País Vasco (18%), Murcia (17%), Aragón (16%), Asturias (16,4%), Castilla y León (13%) y Cantabria (12%).