El Ministerio de Sanidad ha comunicado a las comunidades autónomas que la implantación del copago de los medicamentos que se dispensan en las farmacias de los hospitales es de obligado cumplimiento y que se trata de un procedimiento que debería ponerse en marcha este mes de enero. Fuentes del Departamento que dirige Ana Mato han recordado que el copago de fármacos de dispensación hospitalaria entró en vigor el pasado 1 de octubre. Desde entonces han transcurrido tres meses en los que las comunidades deberían haber solucionado sus problemas de infraestructura e informáticos para poder hacer efectivo el cobro.

Entre los gobiernos autonómicos -incluso entre los sustentados por el Partido Popular- prolifera el rechazo a esta medida. Fuentes de la Consejería de Sanidad explicaron ayer que el Ejecutivo de Javier Fernández ya presentó el pasado otoño un requerimiento al Ministerio solicitando que retirase una norma "que resta equidad y suma vulnerabilidad a los pacientes más débiles o pluripatológicos, gravados ya por otros copagos".

Sin embargo, prosigue el Principado, dicho requerimiento no fue aceptado, por lo que se presentará próximamente "un recurso contencioso-administrativo en el que se está trabajando". A juicio de la Consejería, el citado copago "dificulta el acceso de determinados pacientes a sus tratamientos (muchas veces esenciales), con lo que supone un riesgo para la salud". "Se corre, además, el riesgo", prosigue la Consejería, "de incurrir en un retroceso en la calidad de la atención sanitaria por la posibilidad de que tratamientos ambulatorios y más cómodos para los pacientes afectados por ejemplo por cáncer, VIH... sean sustituidos por intravenosos, más agresivos para el usuario y más costosos para un sistema que ha de ser público y universal".

Conclusión: por el momento, "el Principado no aplicará este nuevo modelo de facturación, cuya eficacia, en términos de ahorro, es, en último término, muy discutible". Y añade la Consejería de Sanidad: "Obviamente, si la normativa es firme y una vez agotadas las vías, la insumisión no sería tampoco la solución".

El nuevo copago afecta a 43 medicamentos en 157 presentaciones diferentes destinados a pacientes crónicos graves (cáncer, esterilidad o hepatitis C) no hospitalizados, que tendrán que pagar un 10 por ciento de estas medicinas, con un tope de 4,26 euros mensuales.