El músico británico falleció a los 51 años por causas desconocidas en Ibiza, donde residía. Considerado como un icono de la música de los noventa, Paul Walden, su verdadero nombre, creó la canción Infinity (1989), que ha formado parte de los recopilatorios más importantes de la música house de la vieja escuela. Hace siete años veía la luz una nueva versión mucho más moderna, llamada "Infinity 2008", que volvió a convertirse en un gran éxito de ventas con más de doce millones de copias vendidas. Aunque Walden estudió Odontología, prefirió dedicar su vida a su gran pasión, la música, y dejó de lado sus estudios para dedicarse de lleno a lo que le convirtió en uno de los músicos más reconocidos de la acid house inglesa gracias a "Infinity".