Un año después de su llegada a España, Netflix ha triplicado el tamaño de su catálogo, tiene una audiencia que le dedica de 20 a 30 horas mensuales y está a punto de estrenar la primera producción española, pero aún se considera un servicio "nuevo" que tiene el reto de llegar al usuario común y corriente. Los usuarios españoles le dedican una media de 20 o 30 horas mensuales y prefieren el contenido exclusivo de la plataforma, algo habitual en los distintos territorios en los que opera.