Ser ingeniero informático o de telecomunicaciones hoy día es sinónimo de empleo. "Hay alumnos de la Universidad de Oviedo que ya en segundo curso de carrera realizan colaboraciones con empresas, en tercero están trabajando y en cuarto, les hacen indefinidos", apunta el decano del Colegio Asturiano de Ingenieros en Informática del Principado y profesor de la Universidad, José García Fanjul. En estas líneas se recogen las claves de la radiografía del sector profesional en Asturias, que hace tiempo que se presenta muy favorable "tanto desde el punto de vista de la empleabilidad como de la tipología del contrato", continúa Fanjul. En ese análisis le acompañó la decana del Colegio de Ingenieros Técnicos en Informática, Aurora Barrero, quien añade a las óptimas condiciones de empleabilidad la posibilidad de promocionar y llegar a puestos importantes.

Estudios concretos. Ese horizonte tan halagüeño hace tiempo que choca con un muro. Los dos colegios profesionales demandan un estudio claro sobre la realidad del sector en el que tanto la Administración como las empresas -con ayuda de los propios colegios- puedan concretar los objetivos y necesidades para los próximos años además de concretar su realidad actual. "Se nos habla siempre de grados de empleabilidad muy altos, más del 90%, pero hace falta un análisis en profundidad", subraya José García Fanjul. Aurora Barrero apunta, además, que es este momento se está dando, incluso, un cambio de tendencia y hay muchos profesionales que están comenzando a regresar a Asturias. En ese estudio de la profesión, insisten los decanos, deben estar tanto la parte pública como la privada, "y las pymes y startups, que tenemos un cantera grande en Asturias".

La vuelta a Asturias. Los que toman ahora la decisión de regresar lo hacen porque se dan las condiciones favorables pero también porque las empresas se encuentran un déficit enorme de informáticos. La estimación en el ámbito europeo para los próximos cinco años es que no se podrán cubrir un millón de puestos de trabajo por falta de competencias digitales para ello. Y la patronal del sector TIC en España calcula que en tres años habrá 300.000 empleos sin cubrir en el mismo sector. "No solo estamos hablando de TIC, hay muchas empresas del sector industrial que cuentan con departamento de informática, algunos de ellos con más de cien personas, y eso hay que tenerlo en cuenta", opina Barrero. "Para los que se fueron a Madrid y al extranjero hace unos años es buen momento para volver porque hay mucha oferta", continúa.

Las empresas. Uno de los principales valores de las empresas TIC de la región radica en que, con muy pocos empleados, se pueden lograr facturaciones importantes, apunta la decana del Colegio de Ingenieros Técnicos Informáticos del Principado. "Aquí es todo conocimiento", añade José García Fanjul. Prueba de ello es que firmas con solo cuatro trabajadores son capaces de alcanzar una facturación anual de medio millón de euros. Sucede lo mismo con las 'startups', perfil al que responden todos aquellos negocios ligados a la innovación o a la tecnología que son "muy rápidamente escalables", a juicio de Barrero. "Pocas personas que funcionan como un equipo y tienen la misma visión resultan más productivas que una estructura más grande. En las TIC funcionan muy alienados", especifica la decanos de los Ingenieros Técnicos en Informática.

Los perfiles más demandados. Los requerimientos del mercado son muy cambiantes. "Es difícil tener experiencia en un campo muy concreto porque la tecnología cambia constantemente", advierten los decanos de los colegios profesionales, quienes recomiendan "mantener contactos con mucha gente. Un buen profesional de la informática debe estar dispuesto también a reconocer sus limitaciones".

Tendencias a futuro. El mundo se hace plano. Los trabajadores de las empresas ya no tienen que cumplir horarios. Pueden trabajar con un portátil desde cualquier lugar. El trabajo se mide por objetivos cumplidos y las oficinas desaparecen. "Trabajar en remoto será tendencia a futuro", entienden Fanjul y Barrero. Esta realidad lleva como consecuencia una internacionalización del trabajo. "Cuando más escalas, hacen falta idiomas porque no existen fronteras", arguyen. Internet de las cosas, ciudades inteligentes, "wearables" (dispositivos que se llevan debajo o incluidos en la ropa y que pueden ser programados por el usuario para realizar diferentes funciones), o datos abiertos ("Big Data") son las tecnologías más candentes. "Lo que valía hace cinco años ahora ya no sirve", especifica Fanjul sobre un entorno que obliga a los profesionales a "actualizarse constantemente".

Los sueldos. "Tenemos siempre la sensación de que nuestros titulados pueden obtener una remuneración mejor en el extranjero", apunta como idea José García Fanjul. Sin embargo, un estudio nacional del Consejo de Colegios de Informática revela que relación existente entre la edad y el salario es positiva: a mayor edad, mayor salario. El 78,5% de los mayores de 45 años perciben anualmente más de 30.000 euros; en contraposición, el 83,8% de los que tienen 30 años o menos, son remunerados por debajo de los de 30.000 . Entre ambos se encuentra el colectivo de profesionales entre 31 y 45 años, que percibe en un 94,3% de los casos entre 12.000 y 60.000 euros.

Formación. Se apunta a la necesidad de situar a la Informática al mismo nivel que la Historia o la Literatura. Eso requiere de profesorado, pero también de que la legislación cambie, concluyen los decanos asturianos. "La adaptación no es comprar una pizarra digital sino educar en competencias digitales", zanjan.