El peso de los sectores oficial y critico en Asturias se calibrará tarde o temprano. Algunos delegados del comité autonómico creían que ese primer duelo podía tener lugar en la reunión del pasado jueves, con la votación de una resolución, reclamando el adelanto del congreso, que finalmente no se materializó.

Las posiciones entre ambos bandos están encontradas. Medirán fuerzas, con toda seguridad, cuando se elija a los delegados del próximo congreso federal, piedra de toque para el posterior congreso regional. Inmerso en la batalla interna, Javier Fernández todavía no ha despejado la incógnita de si concurrirá al que sería su quinto mandato al frente de la FSA, desde que resultó elegido en 2000 con el apoyo del SOMA.