El estanco del Carbayedo, en la calle Severo Ochoa, vendió un décimo agraciado con el quinto premio. Despachado en máquina, el 00580 dejó un pellizco de 6.000 euros en una administración con fama de Rey Midas. El año pasado, ese mismo local dejó un cuarto premio, aunque con otros dueños. Los actuales responsables del negocio, Olga Sambricio y Antonio García, madrileña y ovetense, se hicieron con las riendas del estanco en mayo. "Nos hace una ilusión enorme", dijeron. El número salió a las 11.13 horas y desde entonces atendieron el teléfono por turnos. Todos querían saber si el 2016, el número que jugaba el estanco -efemérides del traslado del local a manos de la pareja- era el premiado. "Al ser uno obtenido en terminal lo puede tener cualquiera", comentaba la propietaria con su perrita "Lua" en brazos, el amuleto de la administración. Muchos fueron los curiosos que esperaban que el primer premio se dejara ver, pero al final se paseó a unos metros.