La llegada del buen tiempo y el consiguiente incremento de las relaciones sociales, particularmente entre la población más joven, han generado en Asturias un fuerte aumento de la cifra de contagios de coronavirus -que habrá que ver si es pasajero-, y también un incremento de las personas declaradas en cuarentena por haber sido contactos estrechos.
Los 194 casos nuevos de covid-19 notificados -y diagnosticados el martes- son la cifra más alta en la región desde los 222 detectados el pasado 12 de febrero. Desde ese día, no han vuelto a alcanzarse los 200. ¿Es preocupante la situación? Según el Observatorio de Salud en Asturias, dependiente de la Consejería de Salud, la cifra de anteayer es “grave”. Sin embargo, “es posible que se deba a un impacto puntual tras los días festivos de la Semana Santa”.
También influye otro factor: “Una búsqueda más activa en la franja de 15 a 25 años, tras los llamamientos realizados los últimos días”. En este tramo de edad, la incidencia acumulada en los últimos siete días “es más del doble que la media”. Y un elemento más, destacado ayer por el consejero de Salud, Pablo Fernández: ha aumentado la trazabilidad de los contagios hasta niveles cercanos al 80 por ciento, lo que parece indicar que los casos nuevos se derivan de “brotes ya conocidos”.
En las próximas jornadas se verá si este aumento es un pico aislado o constituye el inicio real de la cuarta ola en Asturias. Lo que no deja resquicios para la duda es que, con la llegada de la primavera, la vida social de las personas se ha intensificado. Y esto supone que, las que resultan contagiadas, generan un mayor número de contactos estrechos que han de ser aislados y vigilados por si también contraen la enfermedad.
Hay positivos con un contacto estrecho y jóvenes que pueden llegar a ocho
Vayamos a las cifras. En las últimas semanas, en el Principado se ha registrado un promedio de unos 120 casos de covid al día. Hace dos meses, en pleno invierno, daban una media de 1,95 contactos estrechos. Hace un mes esta cifra creció hasta 2,5. Y actualmente cada nuevo diagnosticado declara un promedio de 3,5 contactos cercanos que requieren confinamiento. Esto significa que cada día entran en aislamiento unos 420 asturianos. Según fuentes consultadas por este periódico, la variabilidad es muy grande. Hay positivos con un contacto estrecho y jóvenes que pueden llegar a ocho. Un problema añadido es que los jóvenes se muestran especialmente resistentes a dar información y a quedarse encerrados en casa diez días, como establece el protocolo.