Hace escasas fechas un nutrido grupo de conductores del operativo del Plan de Transporte a los Lagos de Covadonga pusieron colofón a su intensa temporada veraniega con un almuerzo de confraternidad que tuvo lugar en el popular restaurante María Rosa, en Vega La Tiese, gestionado por Héctor Blanco Fanjul, al que obsequiaron con un bonito reloj de pulsera.
Pero el bueno de "Hectorín", como le conocen sus íntimos amigos, merecía más. Porque este pasado verano demostró su solidaridad al prestar ayuda en el accidente del autobús que volcó en la carretera de los Lagos a finales del pasado julio. El hotelero también fue agasajado por los taxistas de Cangas de Onís.
Los profesionales no dudaron en tener otro detalle con el joven hostelero, natural de Intriago. Así que se rascaron el bolsillo y le regalaron una maqueta de exposición de Land Rover, hecha a mano, artesanalmente.
Detallazos que no pasan desapercibidos y más cuando quien los recibe es una persona muy apreciada en los Picos de Europa, además de gran profesional de la hostelería. Y después de toda la ayuda voluntaria que prestó en el accidente, mucho más querido.