"Queremos que salga bien y no sea un caos", reclaman los sindicatos respecto al proyecto de las Escuelinas

Las fuerzas sindicales instan a que las trabajadoras, una vez integradas en el Principado, vean igualadas sus condiciones laborales y retribuciones salariales

Por la izquierda, Laura González y Jorge Caro (CSIF); Ana Castellano y Cristóbal Puente (UGT); y Borja Llorente y Tania Alonso (CCOO)

Por la izquierda, Laura González y Jorge Caro (CSIF); Ana Castellano y Cristóbal Puente (UGT); y Borja Llorente y Tania Alonso (CCOO) / Mario Canteli

"Las movilizaciones responden a la no voluntad de la Consejería de Educación de hacer ningún tipo de negociación. Nos vemos obligados a convocar la huelga. Queremos que salga bien y que no sea un caos". Los sindicatos de la enseñanza pública asturiana, CCOO, UGT y CSIF, explicaron que las razones de los paros del personal de las escuelas infantiles, previstos para los días 18 y 20 de junio, radican en dos factores fundamentales: la estabilización del personal no estabilizado y la implementación del carácter educativo en el primer ciclo de educación infantil. Además, pusieron el foco en las desigualdades salariales entre el personal según los ayuntamientos de procedencia.

"Igual trabajo pero distinto sueldo. Actualmente, hay diferencias salariales de hasta 400 euros", señaló Laura González, responsable de escuelas infantiles de CSIF. González explicó que, tal y como están planteados ahora los convenios de los distintos centros, se pueden dar casos en los que trabajadoras de una misma escuelina, que realizan el mismo trabajo, lo hagan con una gran diferencia salarial.

Borja Llorente, de CCOO, explicó que una de las medidas para solucionar esta problemática sería la incorporación del personal de la red de 0 a 3 años en el grupo B de funcionarios. Según afirmó, una de las incógnitas del traspaso de las trabajadoras de las escuelas infantiles de manos municipales a autonómicas es el grupo en el que serán incorporadas. "La idea es que se integren en el C1, pero las técnicas superiores deben estar en el B. Las están infracualificando a nivel salarial", señaló Llorente, que añadió: "Que pasen al grupo B y a partir de ahí negociar las condiciones salariales. Debemos determinar condiciones de trabajo similares y corregirlo al alza". En ese sentido, el representante de CCOO explicó que los ayuntamientos deberán asumir la las diferencias.

En ese sentido, otro de los puntos tiene que ver con la estabilización del personal no estabilizado por los ayuntamientos. Actualmente, el personal de las escuelas está compuesto por unas 600 trabajadoras de las que unas 100 no estarían estabilizadas. Las fuerzas sindicales advierten que corren el riesgo de perder su trabajo una vez el Principado asuma la gestión de las Escuelines. "Esas plazas podrían someterse a una oferta de empleo público y el personal no estabilizado podría irse a la calle", destacó Cristóbal Puente, de UGT. Además, también proponen que en la ley se incluya una disposición transitoria para la convocatoria de un concurso que "recoja a las compañeras que no han ido a los procesos de estabilización".

Además de la estabilización, los sindicatos se refirieron al otro gran punto de sus reclamaciones: la implementación del carácter educativo. En ese sentido, hicieron hincapié en la necesidad de implementar formación continua al personal y de instaurar la pareja educativa. Puente, señaló que, si bien las trabajadoras de las escuelas infantiles "no son cuerpos docentes" sí que son "equipos docentes": "Exigimos que entren con carácter pedagógico", recalcó.

Además, también se atajó la problemática de las horas destinadas a la burocracia y a las labores de atención a familias, coordinación o evaluaciones. "No hay un solo minuto para ello. Tal y como está redactado, el personal meterá horas extra de forma gratuita", recalcó Llorente.

Por otro lado, las organizaciones sindicales señalaron que otro problema tiene que ver con las matriculaciones, por las cuales advirtieron que se están produciendo casos en los que se están realizando matrículas tanto en los centros municipales como en los autonómicos. "En septiembre habrá alumnos matriculados en dos centros, lo que afectará a la gestión de personal", señaló González.

"Hagamos las cosas bien. Todos estamos de acuerdo y comprometidos en que salga bien, pero ahora es sustituir un caos municipal por un caos autonómico", criticó Puente, que insistió en resolver la estabilización y el carácter educativo.