El empate ante el Tuilla (0-0) en Miramar del pasado domingo no sorprendió al técnico del Marino, Oli Álvarez, porque señaló, "entre los seis de arriba hay muy pocos errores y son partidos que los jugadores afrontan muy concentrados porque muchos fueron compañeros y nos conocemos todos muy bien". El técnico recordó que "casi todos los enfrentamientos directos se resuelven con empate" y así fue también en Ganzábal entre el Langreo y el Oviedo B (1-1), aunque el Covadonga se impuso (1-3) al Llanes. "En nuestro caso, el Tuilla estuvo muy bien en defensa y nos cerró todos los caminos hace el gol"

La lectura del partido, señala Oli, es que el equipo necesita trabajar las jugadas a balón parado. "Quiero mejorar las estrategias porque el del Tuilla era un partido para resolver con una jugada ensayada y tuvimos varias ocasiones que no fructificaron como yo esperaba; y si mejoramos en ese tipo de jugadas podemos sumar muchos puntos en la segunda vuelta", señaló.

El del Tuilla fue el segundo empate consecutivo en Miramar tras el del Praviano (1-1) en el último partido del pasado año, pero es una circunstancia que no inquieta al técnico. "Me preocuparía si no estuviésemos en una dinámica tan buena, pero con 21 partidos invictos preocuparse sería no estar con los pies en el suelo, al contrario cada vez tienen más valor nuestros números". Y añadió: "Si no se puede ganar se empata y no pasa nada porque el rival siempre da un poco más contra nosotros porque nos respetan y nos lo ponen más difícil".

Lo cierto es que los luanquinos siguen siendo líderes sólidos y en los dos partidos de la segunda vuelta llevan dos puntos más al ganar a L'Entregu (1-5) cuando en el resultado en el debut liguero fue de empate (1-1) y contra el Tuilla se repitió el empate del Candín, aunque allí fue a dos.

El equipo descansa hoy martes y volverá al trabajo mañana (10.00 horas) en Miramar. Los jugadores están cansados porque el estado del campo, muy blando por la lluvia caída, exigió un gran esfuerzo al llevar los luanquinos siempre llevaron el peso del partido en busca del triunfo y Oli anuncia que esta será una semana de trabajo para coger frescura.

David González es el más preocupante porque arrastra molestias en una costilla desde el partido de El Entrego y estará entre algodones para recibir el próximo domingo (17.00 horas) al Lugones en Miramar. Cayarga tampoco está al cien por cien de sus molestias en los aductores.