El pequeño praviano Izan Álvarez murió en el verano de 2017 cuando disfrutada en un campamento de verano en la granja escuela del Palacio de la Bouza, en Soto del Barco. Tenía 5 años. Ahora el Ministerio Fiscal solicita tres años y medio de cárcel para la directora del citado centro y dos monitoras. Pide también indemnizaciones que suman 282.000 euros. La Fiscalía considera los hechos constitutivos de un delito de homicidio por imprudencia grave en la modalidad de imprudencia profesional, de acuerdo al escrito de calificación hecho público este mediodía.

El Ministerio Fiscal considera que la encargada de la instalación no adoptó ningún tipo de medida de precaución, ni siquiera la más elemental, en el desarrollo de la actividad de piscina con el niño, que tenía pánico al agua. Destaca a su vez que el número de menores a cargo de las dos cuidadoras era considerablemente mayor a lo permitido por ley y que la piscina no tenía licencia de apertura y carecía de socorrista.

La directora, siempre según el escrito de acusación de la fiscalía, no había solicitado al Instituto Asturiano de la Juventud autorización para el desarrollo y organización de actividades de aire libre. Se acusa igualmente, como responsable civil, a la entidad propietaria del negocio.