Alberto Vior es más de ruedas que de barcos: de crío apenas dejaba descansar a la bici y ahora sueña con recorrer el mundo con su moto, una Pegasus 1200 Adventur. Lo suyo, pues, no será una expedición como aquella con la que Magallanes-Elcano completaron la circunnavegación del planeta hace 500 años, pero casi. Vior está, como aquellos, dispuesto a cumplir un sueño y si bien ya no llega a tiempo para demostrar que la Tierra es redonda, sí pretende llegar a los más jóvenes con argumentos de peso: “Con una tienda de campaña y con platos preparados se puede viajar por poco dinero, y no hace falta esperar a los cincuenta años como tengo yo”, afirma este avilesino que hoy partirá de Avilés rumbo a la región rusa de Magadán. Entre el barrio de La Magdalena y esta ciudad hay 14.000 kilómetros por lo que, entre ida y vuelta, Vior completará nada menos que 28.000 kilómetros. Invertirá 1.900 euros en gasolina.
Tras pasar por Francia, Alemania, Polonia y Lituania, Vior, que es Policía Nacional en la Comisaría de Avilés y recientemente ha publicado “Tierra y cielo sobre mi moto” (Ediciones Círculo Rojo), entrará en Rusia por la frontera de Letonia, y tiene previsto hacerlo el día 29 o 30 de julio. Antes de llegar a Magadán, el agente se adentrará en Siberia para realizar los 2.000 kilómetros de la afamada, complicada y siniestra ruta de los huesos. Esta carretera une las ciudades de Magadán y Yakutsk. “Esa será mi meta, en un lugar donde hay enterrados dos millones de muertos”, indica el viajero. En los meses de invierno, esa zona, la ruta de los huesos, llega a alcanzar los 50 grados bajo cero y es una de las latitudes más frías del planeta.
Tras su salida de Avilés, la primera parada la hará en torno a las 10.30 horas en el área de servicio de La Franca, cercana a la localidad asturiana de Llanes, donde tomará un café con unos amigos, para después continuar hacia Castro Urdiales, en Cantabria. En la localidad cántabra comerá son su hermana y en torno a las 12.45 horas continuará con su aventura, pero ya no parará más en España, salvo para repostar o por pura necesidad, hasta llegar a París, en Francia, donde hará su primera noche.
Alberto Vior está casado y tiene dos hijos, pero el viaje lo hará en solitario. La única compañía que tendrá a lo largo de su hazaña será las de los lugareños de las ciudades y pueblos por los que vaya atravesando y, de quienes, además, espera que sean hospitalarios. Esta vacunado contra el covid y lleva a buen recaudo un certificado de vacunación traducido al inglés. Con él y su moto van noventa bandejas de comida, cápsulas de café y, para la ducha, un bidón de agua.
Y es que este motero de 50 años hará el viaje sin pernoctar en hoteles ni acudir a restaurantes: dormirá en su tienda de campaña y se alimentará gracias a los platos preparados de Carretilla, uno de sus patrocinadores, junto al Outlet Pasión Motera, Sercar, Anagrás, Orsei y Alpa.
Alberto Vior asegura que dar la vuelta al mundo en moto era uno de sus sueños: “Lo hago ahora, porque tras dar la vuelta a Asturias, a España y a Europa me siento preparado. Además, también quiero que sirva para demostrar que se puede viajar sin gastar mucho dinero, sin necesidad de tener que esperar a tener 50 años. Quiero que los jóvenes vean que se pueden ir un fin de semana o unos días sin gastar dinerales, que con una tienda de campaña y unos platos preparados es suficiente”.
Toda la aventura de Alberto Vior se va a poder seguir a través de su canal de youtube: Pegasus Sin Rumbo https://www.youtube.com/user/alberbego. Tras Rusia será América, pero eso ya en 2022.