Femetal lanza su mayor cartera formativa en la lucha contra la falta de profesionales

La cartera de proyectos de las empresas del potente sector metal asturiano están completas, el problema es con qué trabajadores cualificados cuenta para sacarlos adelante. A esto se suman los grandes proyectos previstos por las multinacionales con la transición energética. La carencia es de tal gravedad que muchas compañías se ven obligadas a no aceptar más pedidos porque no tienen plantilla con la que afrontarlos. Esta compleja situación ha llevado a su patronal, Femetal, a buscar fórmulas que le permitan formar a profesionales cualificados en todas las ramas y categorías. Así, este año gestiona la mayor oferta formativa de los últimos tres quinquenios y la previsión es que de las aulas salgan unas 1.500 personas con capacitación para entrar en un sector con futuro y en el que el 80% de los empleos son indefinidos. La formación a la carta que inició de manera pionera con el Ayuntamiento de Avilés y que ahora también se imparte con el de Gijón es un ejemplo del éxito.

"El objetivo es tratar de satisfacer las necesidades formativas de nuestras empresas, abordando además nuevos sistemas de formación para los trabajadores, porque estamos además en un momento de transición y necesitamos incorporar nuevos perfiles y talento en todos los ámbitos, no solo en talleres, sino también en oficinas técnicas, administración... en toda la cadena", explicó María Pérez Medina, secretaria general de Femetal.

La media de ocupados en el metal asturiano en 2022 (últimos datos cerrados) fue de 27.300 trabajadores. La industria cerró mayo con 4.032 desempleados registrados, la cifra más baja de toda la serie histórica desde 1990. "Ahora mismo se contrataría al menos al 95% de todo el personal que se pudiera incorporar procedente tanto de la formación reglada como de la ocupacional", asegura Pérez Medina.

Para atender la demanda de profesionales, Femetal tuvo que hacer un esfuerzo de homologación para conseguir la excelencia en la gestión de formación, lo que ha permitido poder optar a ayudas y programas en concurrencia competitiva.

Rafael Bernardo, responsable del área de formación y proyectos en Femetal, explica que la oferta formativa abarca de manera transversal a todos los perfiles. Así, está la ocupacional, destinada a personas desempleadas y con compromiso de contratación, de los que ya hay nueve comprometidos pero que se seguirá ampliando.

Otro ámbito es el orientado al personal en activo, para avanzar en la especialización del oficio profesional, en las denominadas "cualidades blandas" y en las nuevas demandas relacionadas con la automatización y la digitalización en todas las áreas de la compañía. En este caso la previsión es realizar casi un centenar de cursos en este ejercicio.

Y después está la formación de más elevada cualificación: el de ingeniería técnica internacional de soldadura, que ya lo están cursando 21 profesionales, y el Máster en gestión medioambiental industrial, que acaba de comenzar y en el que participan una docena de personas. Ambos cursos capacitan para atender y certificar los más exigentes requisitos que se imponen en proyectos de ámbito internacional, y en Asturias cada vez son más las empresas que participan en concursos de estas características y que necesitan a estos expertos en sus plantillas.

Una curiosidad: en ambos la mayoría del alumnado es femenino, lo contrario de lo que ocurre en los cursos orientados al desarrollo profesional en el taller. "En todo el sector solo un 15% de la plantilla son mujeres, y en taller solo el 5%. Aquí hay oportunidad de futuro, con unas buenas condiciones laborales y salariales –es el mejor quinto convenio del país–", remarcó la secretaria general de la patronal.

Para desarrollar toda esta formación, Femetal ha llegado a acuerdos con centros de formación, como el de la Fundación Masaveu y Revillagigedo, entre otras. Pero quiere más.

"Queremos colaborar con los expertos en formación en cada una de las materias y en todos los ámbitos, no sustituirlos. Queremos llegar a acuerdos con organismos, instituciones y empresas, con todo aquel que pueda ayudarnos a impartir la formación de calidad que necesitan nuestras compañías", insistió María Pérez Medina.

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