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María Teresa Domínguez Murias

La lucha de los trabajadores ante la ineficacia política

La venta de Alcoa, incumplimientos contractuales y el precio de la responsabilidad de la Administración

Año 2019, Pedro Sánchez, mitin en el Polideportivo San Francisco Javier, La Coruña: “Hemos garantizado un futuro para Alcoa”. Se refería, además, a la aprobación del estatuto del consumidor electrointensivo como solución. En Galicia al menos se comprometía con la llegada del AVE.Días después, Pedro Sánchez, en un mitin multitudinario en el salón de actos del Palacio de Congresos de la Feria de Muestras de Gijón, de nuevo el Presidente prometía no dejar en la estacada a Alcoa.

Días antes de las elecciones de abril del 2019, Adriana Lastra con la virulencia dialéctica a la que nos tiene acostumbrados decía: “El futuro de Alcoa está garantizado con cuatro inversores en la mesa”. Hablaba de la buena relación entre el Gobierno de Asturias y de España, que lo que estaba haciendo el gobierno central era darle seguridad al asturiano.

Hace unos dos años, la Alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, refiriéndose a Alcoa, dijo: “Sólo servirá la continuidad de la actividad industrial.”

Raúl Blanco, el Secretario General de Industria en febrero de 2019 hablaba de que el 31 de julio habría solución para las 600 familias afectadas tanto en La Coruña como en Avilés, gracias al acuerdo con Parter Capital Group. Decía que era su mayor reto conseguido en los últimos años. Antes, los trabajadores se manifestaban frente al Ministerio de Industria y mostraban su preferencia por el otro comprador Quantum antes que Parter. El Gobierno y Alcoa optaron por Parter.

Efectivamente se firmó un acuerdo. El compromiso que Alcoa tenía era vender a un comprador serio, solvente y riguroso, que se hiciese cargo de las plantas y con ello del empleo, siendo necesario para ello que se acometiese la necesaria adaptación y reindustrialización de las instalaciones, para alejarlas de la actual obsolescencia, lo que implica lógicamente fuertes inversiones. Alcoa, que según el acuerdo alcanzado era quien elegiría el comprador, tenía capacidad suficiente para comprobar su capacidad inversora, su seriedad como comprador.

La Ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, decía que una comisión revisaría mensualmente el cumplimiento de la propuesta de la multinacional estadounidense, que se había comprometido a invertir 103 millones de dólares, para asegurar la viabilidad de la empresa, ofrecía su compromiso para garantizar lo acordado... Lo que pasó después todo lo conocemos.

La titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de la Audiencia Nacional, autorizaba en el mes de noviembre del 2021 la solicitud de concurso de Alu Ibérica, tras la petición del Administrador Judicial, como única vía adecuada para la protección del patrimonio, así como de los derechos de los trabajadores y del resto de acreedores. El engaño, el incumplimiento contractual y la ausencia total de voluntad política de buscar una solución.

Como avilesina, como hija de trabajador de la antigua Ensidesa, hoy Arcelor, pero como todos en la comarca de Avilés somos conscientes de la transcendencia del cierre de nuestra planta, de lo importante que es para nuestra comarca la continuidad de “nuestra gran industria”. Alcoa no será la última, la ineficacia del Estatuto del consumidor electrointensivo, aprobado por el Real Decreto 1106/2020 de 15 de diciembre por el gobierno de Sánchez, no soluciona los problemas de Asturias, no da solución a los costes eléctricos de la industria asturiana. Alcoa no será última, y es hora de que ante todo se diga la verdad. Como avilesinos nos merecemos que se nos diga si existe un plan de viabilidad, de reforma estructural que nos permita mirar con cierto optimismo a nuestro futuro, un plan alternativo a la destrucción de la que durante décadas ha sido el motor de nuestro desarrollo.

Respecto a la reprobación que la semana pasada tuvo lugar en la Junta General del Principado del Consejero de Industria, Barbón ha dicho que el único que puede nombrar o cesar a un consejero es el Presidente, o sea él.

La reprobación fue presentada por toda la oposición a excepción de Cs, que tras ver que la izquierda (Podemos e IU) apoyaba ésta, dio finalmente su apoyo a dicha reprobación.

Efectivamente la reprobación carece de validez jurídica alguna, tan sólo política, reprobación política por el órgano que representa la soberanía del pueblo.

Otra cuestión diferente es decir que el Consejero se ha limitado a avalar la acción de gobierno del señor Barbón como Presidente del Principado de Asturias y la de Pedro Sánchez como Presidente de España. Se debe de acabar la reprobación política, en tal caso con lo acontecido esta pasada semana. El “deber in vigilando”, la actividad inspectora de nuestra Administración de nuevo vuelve a dar muestra de su inexistencia, del incumplimiento del artículo 103 de nuestra Constitución: “La Administración Pública sirve con objetividad los intereses generales y actúa de acuerdo con los principios de eficacia, jerarquía, descentralización, desconcentración y coordinación, con sometimiento pleno a la ley y al Derecho”.

Me gustaría hacer una reflexión comenzando en la Administración Local de Avilés, representada en su Alcaldesa Monteserín, siguiendo por Administración Autonómica encabezada con el señor Barbón como Presidente y finalizando en la Administración Central encabezada por el señor Pedro Sánchez como Presidente, pero en este caso quiero hacerla extensiva como asturiana a la señora Lastra y que debería aportar un plus de conocimiento sobre nuestra región… en el caso Alcoa, ¿se ha actuado con eficacia, se ha sabido defender los intereses generales de los avilesinos y de los asturianos?

Por cierto, lo de la privatización de la derecha, Aznar, bla, bla bla, queda ya muy lejano, y está muy bien para llenar otro polideportivo en vísperas electorales. Hablamos de responsabilidades de los años 2019, 2020, 2021, cuanto menos. Si quieres llegar a la excelencia en política, ha de cultivarse la capacidad de ser responsable decía Winston Churchill: “El precio de la grandeza es la responsabilidad”. O traducido a nuestra cultura popular pa los del asturiano que parece ser más importante ahora que mantener la industria en esta región: “No adornase con hestories que son verdaes a medies, que de tanto ser grandones crecieron-nos les oreyes”.

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