Las competiciones de balonmano de ámbito territorial deberán cesar su actividad durante, al menos, las dos próximas semanas en Cantabria, así como también los entrenamientos. De este modo, quedarán aplazados hasta el día 18, fecha en que concluye el cierre perimetral de la región y de sus municipios.

La decisión deportiva obedece, por tanto, a las últimas restricciones de movilidad decretadas por el Gobierno autonómico, que "obligan a poner en pausa" hasta esa fecha toda la actividad deportiva de los equipos territoriales, tanto la disputa de partidos como el desarrollo de entrenamientos.

Con esta nueva normativa se paralizan los campeonatos de Segunda División masculina y la Copa Cantabria senior femenina, informa la Federación Cántabra.

La competición masculina encaraba este fin de semana su segunda jornada, mientras que la femenina acumulaba una jornada más ya disputada en el calendario e iba a disfrutar de descanso esta semana.

Concretamente, lo que se restringe es la práctica deportiva en espacios cerrados y no podrán, por tanto, realizarse ni entrenamientos, ni la propia competición o cualquier evento en estas instalaciones.