A falta de siete meses para las próximas elecciones municipales, la portavoz de Somos Llanera, Isabel Fernández, ya ha adelantado que se presentará a las primarias de Podemos en el concejo. Evita hablar de grandes decisiones de futuro, ya que supedita éstas al mando de su asamblea local y tiene claro que la promoción de la salud será su bandera si logra imponerse en la carrera al Ayuntamiento de los morados.

- Se ha descubierto como candidata a las primarias de Podemos Llanera de cara a las próximas elecciones municipales después de asegurar en varias ocasiones que no tenía claro si continuaría ligada a la política. ¿Qué le ha hecho tomar la decisión?

-Considero que hice un buen trabajo en estos casi cuatro años y creo que mis concejalías han puesto en marcha iniciativas interesantes e innovadoras. Sobre todo, en materia de salud, en poteciar el asociacionismo y en la apertura de servicios como la oficina de atención al consumidor y el Servicio de Normalización Llingüística.

- Una de las medidas que no puso en marcha y que era una de las banderas del programa de Somos fueron los presupuestos participativos.

-Es mi mayor espina en este mandato. Resultó imposible hacerlo porque al principio no tuvimos ni los medios ni el conocimiento suficiente para ello y, cuando lo tuvimos, no había tiempo para materializar las propuestas que se aprobasen. Por eso decidimos no hacerlo. En cambio, considero que en el próximo mandato sí estaríamos en disposición de llevarlo a cabo.

- Finalmente, irán a las urnas bajo la marca Podemos, condición que había marcado como indispensable para presentarse a unas primarias.

-La asamblea decidió que iremos bajo Podemos. Además, una vez tengamos más o menos clara nuestra organización de cara a las elecciones, hablaremos con Izquierda Unido para ver si quieren presentarse con nosotros como confluencia. También abriremos esta puerta otros partidos y movimientos sociales.

- Se pasó más de medio mandato peleada con su compañero de grupo municipal, Javier García. ¿Tiene miedo que la historia se repita al confeccionar la lista de forma abierta?

-Ese miedo siempre existe, pero hacer una lista cerrada tampoco te garantiza que el ambiente vaya a ser bueno. Lo que sí tengo claro es que si ocurriese como en 2015, cuando tres mujeres eran las más votadas y se adelantó a Javier para hacer cremallera, intentaría que no se hiciese. Aunque ésta es mi opinión personal, la decisión la tomaría, obviamente, la asamblea.

- ¿Y si fuesen tres hombres los más votados?

-Entonces sí estaría a favor de que adelantasen las mujeres. Tiene que haber discriminación positiva hacia la mujer en estos casos. Pero no sé cómo quedará esto, porque antes, en 2015, en el círculo de Podemos éramos más mujeres que hombres y ahora la tónica ha cambiado. Algo estamos haciendo mal.

- Si las elecciones de 2019 dejasen un Pleno igual de fragmentado que el actual, ¿estaría a favor de volver a formar parte de un gobierno tripartito?

-Esa decisión también tendría que tomarla la asamblea, no tengo clara mi postura y tengo mucho de qué preocuparme antes que pensar en eso, pero sí he de decir que yo fui de las que se postuló en contra de entrar en el gobierno en 2015. En el tripartito los éxitos son de los tres, pero los problemas son individuales. Yo me he sentido muy sola.