Es época de infusiones, fervíos o fervinchos para combatir los resfriados y catarros, más que para depurar el organismo tras los excesos gastronómicos de las Navidades, con tanta comilona. María José Dávila, que vende estas hierbas en su puesto de los martes en Pola de Siero, lo explica: "la gente ahora no come como antes, porque ahora se come todo el año, no sólo en estas fechas, a no ser los turrones, pero ya empiezan en octubre y están hasta marzo". Así que los excesos no se limitan a esta época del año.
Las hierbas más demandadas para preparar infusiones son aquellas que ayudan a combatir los catarros que suelen llegar de la mano del frío, por lo que son muchos los que estos días acuden a los remedios caseros para hacer frente al resfriado. Para esos casos, Dávila aconseja una mezcla de hierbas, que ya vende preparadas en una bolsa. Por ejemplo, la de orégano con malva, saúco y tomillo. En caso de bronquios y fatiga, a las plantas ya enumeradas se suma el gordolobo, el tusílago y la pulmonaria.
Pero es la gente de más edad la que más demanda este tipo de preparados, pues los jóvenes no tienen tanta costumbre de recurrir a los remedios caseros. Otros acuden para aliviar problemas intestinales: "Noto mucho estreñimiento". María José Dávila les recomienda folículo de sen, aladiernu o hoja de sen.
Para preparar la infusión aconseja echar una cucharada sopera de estos preparados por cada medio litro de agua, "para no cargarlo mucho". En caso de catarros, se toma "templado o del tiempo", no caliente. Se prepara en agua fría y cuando rompe a hervir se apaga. Ha de reposar un poco, se cuela y listo para tomar. Para endulzar, mejor la miel, porque es "más sana y protege del catarro".
