Mieres del Camino,

Antonio LORCA

El Ayuntamiento de Mieres adjudicó ayer de forma definitiva las obras para llevar a cabo el proyecto de recuperación urbanística del núcleo de Bustiello y del puente sobre el río Aller. La empresa adjudicataria es Jesús Martínez Álvarez S.A., que contará con 638.000 euros para realizar la reforma integral de Bustiello, el poblado protegido que supone uno de los conjuntos más representativos de la arquitectura industrial del concejo de Mieres y de las Cuencas. El presupuesto inicial que se había destinado para esta actuación era de 934.000 euros, con lo que se ahorrarán tras la adjudicación casi 300.000 euros.

El proyecto de recuperación urbanística del poblado minero de Bustiello, incluyendo la rehabilitación del puente sobre el río Aller, será financiado en su integridad con cargo a las partidas para la mejora de barriadas de los fondos mineros. Los trabajos incluirán mejoras en las redes de saneamiento, abastecimiento, electricidad, telefonía, gas y alumbrado. Asimismo, también se actuará en zonas verdes y en el pavimento de las calles interiores de este emblemático poblado minero. A su vez, se llevará a cabo la obra de recuperación del puente sobre el río Aller, que pasará a ser de uso peatonal.

La dirección de la obra correrá a cuenta de la Sociedad Asturiana de Ingeniería y Medio Ambiente, que también coordinará la seguridad cuando se inicien estos trabajos. Fuentes municipales consideran que la reforma ayudará a la conservación de una de las «joyas» arquitectónicas de la historia industrial del concejo.

El poblado Minero de Bustiello fue creado entre los años 1890 a 1917 por la empresa minera Sociedad Hullera Española. El proyecto fue impulsado por el Marqués de Comillas, Claudio López Bru. Este enclave estableció un nuevo modelo de estructura social, que se conoce como paternalismo industrial.

La recuperación de barriadas con cargo a los fondos mineros arrancó en Mieres hace ya más de una década. La primera actuación se concentró en Santa Marina. Hasta la fecha este proyecto es el más ambicioso que se ha ejecutado en el concejo, contando con un presupuesto de seis millones de euros. Con inversiones procedentes de los fondos mineros, el Ayuntamiento ha intervenido, además de en Santa Marina, en San Pedro, Vega de Arriba, Ablaña, La Rebollá, Murias, Rozaes, San Luis, Figaredo y San Francisco, Santa Cruz y San Justo.