Oviedo llora a Yoly Pérez, la directora y “madre” de su Real Banda de Gaitas

Yolanda Pérez Alonso fue, antes que directora, la orgullosa madre y hermana de todos los miembros de la Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo. Por eso, su fallecimiento este domingo ha dejado huérfanos a esa legión de gaiteros y gaiteras, acordeonistas como ella y así hasta cubrir a una legión de músicos con los que viajó por medio mundo y a los que dirigió delante de Reyes y famosos siempre con la jovial incredulidad de quien se consideraba, simplemente, una paisana de Congostinas.

Allí, en Pola de Lena, sus restos mortales serán recibidos este martes a las seis y media de la tarde en la iglesia de Santa María y todos esos músicos a los que tanto cuidó (más de setenta gaiteros) ya están preparándose para despedirla con todos los honores.

José Manuel Fernández “Guti” codirector de la formación junto a Yolanda “Yoly” Pérez y Vicente Prado “El Praviano”, confirmaba ayer esa condición que tenía su compañera de ser la que velaba por todos ellos, la gran madre de la Real Banda. Ella misma, lo dijo alguna vez, orgullosa: “Doy clases, dirijo y a veces hago de madre o de hermana de los componentes”.

Nacida hace 54 años en el concejo de Lena (20 de agosto de 1969), Yolanda Pérez obtuvo el grado superior en el Conservatorio en la especialidad de acordeón y amplió su formación en el ámbito de la enseñanza en la Universidad de Oviedo con sus estudios de magisterio y filología asturiana. De esta forma, Yoly Pérez, que desde muy joven fue solista y se integró en numerosas formaciones como acordeonista, también desarrolló una intensa labor docente, que le llevó por muchos institutos de la región (Gijón, Salas, Mieres, Langreo, Villaviciosa). También ejerció como maestra y tutora, durante varios años, en el Fundoma, en Oviedo.

A toda esta actividad se suma su incorporación al grupo Vetusta como directora hace 27 años, desde donde proporcionaba una cantera de acordeonistas para la Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo, a la que se incorporó ya como directora en marzo de 1999. Madre coraje de todos estos músicos y mujer con arranque y remango, llevaba peleando desde 2019 con un cáncer.