Langreo, M. Á. G.

El PSOE ya tiene definidas las áreas de responsabilidad del nuevo equipo de gobierno local en Langreo, liderado por Esther Díaz. La pérdida de concejales (tres menos que en los comicios de 2007) han obligado a los socialistas a concentrar las parcelas de poder. Es el caso, por ejemplo, de Ana Oliva Rodríguez, que a sus atribuciones en Cultura del mandato pasado suma ahora las de Hacienda. De igual forma, Medio Rural pasa a integrarse junto a Obras en las misma concejalía, que estará gestionada por Vicente Dámaso Fernández, el único rostro nuevo en el Ejecutivo municipal langreano.

Para su tercer mandato como regidora de Langreo, Esther Díaz vuelve a confiar en María Fernández Álvarez para coordinar las políticas urbanísticas y de promoción económica. En concreto, la edil compaginará las delegaciones de Urbanismo, Infraestructuras y Medio Ambiente; Empleo, Comercio, Industria y Tecnología.

Julio César García Menéndez, que en el mandato anterior fue portavoz del grupo municipal socialista, se hará cargo Régimen Interior, Personal, Transportes, Policía Local y Protección Civil, prácticamente las mismas atribuciones que en los últimos cuatro años.

Por su parte, Ana Oliva Rodríguez García sumará, a Cultura y hacienda, la gestión de todo los referente a Política Llingüística, Patrimonio, Control de Cuentas, Compras y Contrataciones. Vicente Dámaso Fernández Fernández, desempeñará, junto a Obras y Medio Rural, la responsabilidad de los Servicios Municipales.

Ana María San Miguel Sánchez seguirá al frente de Servicios Sociales, Vivienda e Igualdad. Sin embargo, en el mandato recién iniciado también deberá hacerse cargo de Juventud y Educación, que en los últimos años había contado con una concejalía específica, en manos de Roberto Menéndez Fueyo. Por último, José Ramón García Zabala será el concejal delegado de Deportes y Participación Ciudadana, atribuciones que se ven incrementadas en este mandato con las de Sanidad y Cooperación Internacional.

La composición del nuevo gobierno local de Langreo cierra la puerta, al menos de momento, a un pacto de gobierno con IU. En un principio, los representantes de la coalición de izquierdas y del PSOE habían decidido reunirse después de la investidura para retomar la negociación. No obstante, IU dejó claro después que era partidaria de llegar a acuerdos específicos en lugar de un pacto estable.