Los profesionales sanitarios del área VIII -correspondiente al valle del Nalón- son los líderes de Asturias en autogestión. De las once unidades de gestión clínica que han suscrito acuerdos con el Sespa para administrar sus propios recursos, ocho está en la comarca. Se trata de los centros de salud de Sotrondio, Laviana y Caso-Sobrescobio, y de los servicios hospitalarios de Riaño de UCI, Cirugía General y Digestivo, Medicina Interna, Salud Mental y Nefrología, compartida en este último caso con el Álvarez-Buylla de Mieres. En breve se sumarán Urgencias y Pediatría.

En las unidades o áreas de gestión clínica (la denominación varía si se usa para la Atención Primaria o para la Especializada) los propios profesionales de cada servicio son los que gestionan el personal, el gasto corriente y las inversiones. Se establecen unos objetivos y, si se cumplen y hay un ahorro, esos recursos pueden destinarse a inversiones, a formación o a incentivos para los profesionales. "Hay unos indicadores de calidad que deben cumplirse, pero lo importante es que, con este modelo, se consigue que el profesional se implique y sienta el servicio como su propia empresa. Se trata de delegar funciones en ellos y es algo totalmente voluntario; nuestra área apuesta muy fuerte por ello, con un departamento de Gestión Clínica específico, y estoy convencido de que en un futuro todo el Sespa trabajará así", indicó Tácito Suárez, gerente del área sanitaria VIII.

Cada unidad de gestión tiene un director y cuenta con un responsables de calidad, uno de enfermería y uno más de docencia. Su campo de acción depende del departamento. Por ejemplo, el área de Medicina Interna del hospital Valle del Nalón suma un centenar de profesionales, principalmente médicos y personal de enfermería. Tania Alonso, responsable de Gestión Clínica del área VIII, remarcó que los profesionales perciben este modelo como "un proceso de cambio donde su criterio clínico es tenido en cuenta en la toma de decisiones de gestión. En 2017, en los acuerdos firmados se cumplieron los objetivos asistenciales un 100%, los de calidad un 91% y los presupuestarios un 64%".