La Policía Nacional ha detenido en Mieres a un delincuente habitual que previamente había robado un ordenador portátil del interior de un vehículo, destrozando una de las lunas laterales para acceder al interior del mismo. El caco fue identificado por un vecino cuando procedía a vender, en plena calle, el material informático sustraído.

Agentes de la brigada judicial de la Policía Nacional de Mieres han sido quienes han procedido a detener al presunto autor del citado robo con fuerza en el interior de un vehículo que estaba estacionado en la vía pública. Fue en horario nocturno. "El autor fracturó el cristal de la puerta delantera del vehículo, sustrayendo del interior un maletín que contenía un ordenador, abandonando el lugar a continuación", explicaron ayer fuentes policiales.

Al día siguiente, el posteriormente detenido fue observado por un ciudadano que se encontraba próximo al lugar, a quien le pareció extraño ver a esta persona con un maletín de ordenador, en actitud de espera y en una zona descampada de la localidad. Siempre según los portavoces de la Policía Nacional, al poco tiempo apareció un vehículo, haciendo entrega del maletín al conductor a cambio de una cantidad de dinero.

Tras las gestiones llevadas a cabo por la brigada local de Policía Judicial de Mieres, resultó identificado el conductor de este vehículo, que fue citado en dependencias policiales. Durante la declaración manifestó que había obrado "de buena fe" al comprar el ordenador, "no sabiendo que el ordenador era robado", haciendo entrega del mismo en el acto. El equipo informático "fue intervenido".

A raíz de la declaración del comprador y de la información aportada por el testigo, se identificó al presunto autor del robo, el cual fue localizado posteriormente en las proximidades de un bloque de viviendas ubicado en la calle Manuel Llaneza, cuando discutía con una vecina del inmueble.

Al detectar la presencia policial, inició la huida subiendo apresuradamente las escaleras del edificio con la intención de introducirse en la vivienda que frecuenta habitualmente, pudiendo ser interceptado por los agentes antes de alcanzar la puerta de entrada. El detenido pasó a disposición judicial, quedando en libertad con cargos.