En la autopista del Huerna (AP-66) se vivieron ayer momentos de tensión. Un gran susto que, afortunadamente, tuvo final feliz. Poco antes de las 9 de la mañana, un camión cargado con sacos de pienso para animales que circulaba en dirección a Asturias se quedó, al menos según las hipótesis iniciales, sin frenos. El conductor, un hombre de 40 años, tuvo la pericia y la sangre fría suficientes para solventar la complicada situación. De esta forma, logró llevar el vehículo pesado hasta una de las áreas de frenado de emergencia existentes en la autopista de montaña. Entró en ella y acabó impactando contra un talud, saliéndose de la vía. La cabina quedó destrozada y el camión ladeado, pero el camionero no sufrió lesiones importantes, solo resultó herido leve. Tal y como informó el 112 Asturias, el conductor "salió por sus propios medios del interior del camión".

Dos bomberos, en la zona de la cabina. | SEPA

Para descartar la existencia de lesiones más graves, el hombre fue trasladado en ambulancia hasta el Hospital Álvarez Buylla de Mieres. Hasta la zona donde se produjo el siniestro, el kilómetro 68 de la autopista del Huerna, se desplazó un equipo de bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias con base en Mieres. También la Guardia Civil y el equipo médico del SAMU. Además, fueron informados del suceso en el centro de control de la autopista.

El aviso al 112 Asturias se produjo a las 8.50 horas. En la llamada se alertaba de que un camión podía haber perdido los frenos, o sufrido algún tipo de avería, y que se había estrellado usando una zona de frenado de emergencia para no poner en peligro al resto de vehículos de la autopista. Inmediatamente se desplegó a todos los equipos de emergencias. Cuando llegaron al lugar del accidente, alrededor de las nueve, el conductor ya estaba fuera del vehículo, había salido por su propio pie, y no había ningún otro vehículo afectado por el incidente.

Afortunadamente, lo que pudo ser una tragedia se quedó en un gran susto.