La reyerta ocurrida hace una semana en el barrio de Pénjamo, en el distrito langreano de La Felguera, motivó ayer una concentración por la convivencia y el respeto a la que acudieron decenas de vecinos. Un acto que también contó con la presencia de una representación del gobierno local con su alcaldesa, Carmen Arbesú, a la cabeza para demostrar su apoyo a la iniciativa ciudadana.
La alcaldesa de barrio de Pénjamo, Lucía Hernández, destacó que esta concentración "se hace de forma pacífica con la intención de reivindicar que no queremos más violencia en el barrio y que el pueblo está unido ante circunstancias como las que ocurrieron hace una semana". Señaló, además, que Pénjamo "es un barrio plural y continuaremos haciendo concentraciones hasta que tengamos una respuesta de cómo frenar la violencia, porque lo que queremos es que haya convivencia, comportamiento y civismo". A consecuencia de la pelea ocurrida una semana atrás, un vecino de barrio fue detenido. Sin embargo, como apuntan los propios vecinos, fue una familia conflictiva a que se enfrentó al arrestado cuando éste se encontraba en una terraza hostelera.
De hecho, en la concentración también participó la mujer del detenido, Tania Marco, ya que su esposo, que fue puesto en libertad, tiene una orden de alejamiento que le impide estar en el barrio. Marco señaló que "solo pedimos respeto y educación, no tenemos nada en contra de esta familia, pero queremos tener una convivencia pacífica". También quiso agradecer de forma pública el apoyo recibido no solo por sus propios vecinos, sino también por los agentes de la Policía Local y Nacional, así como por los sanitarios de Langreo que atendieron a su marido, ya que salió de la reyerta con un brazo roto y una brecha en la cabeza.
El portavoz del colectivo "El Güesperón", Rubén Cámara, leyó un comunicado en la línea de lo que había señalado la alcaldesa de barrio, en el que "queremos resaltar que este sigue siendo un problema puntual con unos vecinos que no quieren la convivencia, porque Pénjamo siempre ha sido y será plural. Aquí caben todas las etnias, culturas y religiones, siempre desde el respeto mutuo. Y sin ese respeto por el vecino, no hay convivencia ninguna".
Apoyo de la alcaldesa
La alcaldesa de Langreo, que inicialmente no iba a tomar parte activa en la concentración, acabó pronunciando unas palabras ante los presentes en las que aseguró que "siempre vamos a estar ahí para los vecinos". Y explicó que había recibido en Alcaldía a Tania Marco y la alcaldesa de barrio "con el objetivo de conocer la situación, porque la colaboración ciudadana es lo más importante a la hora de resolver estos problemas". Dada la presencia de la regidora, algunos vecinos de Pénjamo aprovecharon para quejarse de la situación que viven, asegurando que los problemas de convivencia también se dan en otros barrios del concejo.
Una de las primeras medidas que se tomó tras la reyerta ocurrida en Pénjamo fue la convocatoria de una junta extraordinaria de seguridad –a petición de los grupos que se encontraban en la oposición– en la que se propuso la creación de un consejo local de seguridad. Este órgano, como había apuntado la alcaldesa de Langreo, servirá para poder incluir a la ciudadanía a la hora de resolver problemas, tanto delictivos como de convivencia. El consejo local de seguridad estará abierto a la participación de asociaciones, pero también de organizaciones empresariales y alcaldes de barrio, con el objetivo de "integrar a distintos colectivos que pudieran estar implicados en alguna actuación concreta".
