Quejas en Langreo por los retrasos en la culminación del soterramiento: "Después de catorce años es hora de que la obra termine"

El partido asturianista Aína continúa reuniéndose con diferentes asociaciones y colectivos del Valle del Nalón. Esta vez la organización política mantuvo un encuentro con la Plataforma por el Soterramiento de Langreo, "escuchando las quejas de los vecinos y analizando con sus representantes la situación del transporte ferroviario en el Nalón".

Para la formación "es hora de que las obras se terminen. El soterramiento de las vías empezó en 2009, un proyecto que iba a durar solo 36 meses y que iba a costar 51 millones de euros. Después de 14 años y más del doble de gastos “nos parece que los vecinos merecen que las administraciones se involucren y terminen la obra. Con el final de los trabajos ya llegará el momento de exigir más responsabilidades políticas de las que se tomaron hasta ahora”.

El soterramiento de Langreo: tres versiones y un retraso

Además, prosiguieron los representantes de Aína, "nos preocupan las intenciones del ayuntamiento de Langreo de construir edificios en una zona conocida popularmente como 'zona los contenedores' (pa parcela frente al estadio de Ganzábal que alojó la maquinaria de la obra), donde hacen falta otro tipo de infraestructuras alternativas: deportivas, culturales, parques…". En 2018 los grupos políticos "alcanzaron el acuerdo de no destinar estos terrenos a la construcción de viviendas, pero desde el gobierno municipal parecen haber olvidado su postura inicial".

Línea Gijón-Laviana

Desde Aína también reclamaron la vuelta de las frecuencias de Feve entre Laviana y Gijón "en el menor tiempo posible". En los últimos años, "esta línea perdió más de 800.000 viajeros a causa de las condiciones lamentables en que se encuentra. Si no queremos seguir beneficiando a grandes empresas como Alsa y dando la espalda a los vecinos que necesitan este transporte, las administraciones tienen el deber de abrir esta línea y mejorarla, ya que las condiciones anteriores al cierre tampoco eran aceptables".

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