Atención conductores: Mieres compra un nuevo radar semafórico tras meses sin servicio por una avería

El Ayuntamiento, decidido a reanudar el funcionamiento del «foto-rojo», un dispositivo que sanciona a una media superior a 600 conductores al año

El cruce de la calle Manuel Llaneza con la calle Teodoro Cuesta.

El cruce de la calle Manuel Llaneza con la calle Teodoro Cuesta. / David Montañés

El radar semafórico de carácter rotatorio que está operativo en el casco urbano de Mieres desde el verano de 2013 lleva varios meses fuera de servicio debido a una avería. El dispositivo retomará su vigilancia del tráfico a lo largo de las próximas semanas, según explicaron los portavoces del gobierno local. Tras valorarse varias alternativas, el Ayuntamiento ha optado por licitar la compra de un nuevo dispositivo.

Problemas técnicos detectados a principios de año obligaron a paralizar la cobertura del polémico sistema conocido como «foto-rojo». Por ello, el Ayuntamiento de Mieres lleva varios meses sin tramitar una sanción de tráfico a través del radar semafórico. El motivo es simplemente una avería que ha mantenido inutilizado el sistema. El Consistorio quiere reactivar el «foto-rojo» lo antes posible. Al menos de momento, no hay intención de suspender este sistema de control de la circulación urbana.

Los planes municipales pasan por adquirir un nuevo dispositivo. Y es que, a juicio de los responsables municipales no compensa arreglar el actual radar, decantándose por instalar un nuevo equipo con tecnología más actualizada. Será por tanto necesario abordar un proceso de licitación, por lo que la reactivación del servicio deberá posponerse aún durante algunas semanas.

El conocido como «foto-rojo» se activó hace ahora justo diez años, concretamente en el verano de 2013. En sus primeros ocho meses de actividad, llegó a «cazar» a más de 1.500 conductores. Su presencia en ciertos cruces es conocida por los mierenses, ya que está debidamente señalizada, pese a lo cual su actividad sancionadora ha sido intensa año tras año. Tras caer el balance de incumplimientos a 515 en 2019, en los dos años siguientes se detectó un sensible crecimiento. En 2020 las infracciones sancionadas fueron 655, por las 694 del ejercicio siguiente (2021).

Teniendo en cuenta que cada sanción del «foto-rojo», además de la retirada de cuatro puntos de permiso de conducir, conlleva el pago de 200 euros, que se quedan en 100 en caso de recurrir al mecanismo de «pronto pago», este sistema de control del tráfico ha estado inyectando en las arcas municipales una importante cantidad de dinero.

La sanción

Saltarse un semáforo , con independencia del tiempo que llevara en rojo (la misma penalización por una milésima de segundo que por cinco segundos), conlleva, a nivel de puntos, idéntica sanción que circular a 170 kilómetros por hora en un tramo de autovía con limitación a 120. También es equivalente a conducir poniendo en peligro o entorpeciendo a ciclistas.

Este dispositivo ha estado siempre envuelto en la polémica. El Consistorio mierense ha sostenido en todo momento que el aparato, que por regla general está colocado en la calle Ramón Pérez de Ayala, «cumple perfectamente con las homologaciones requeridas». Por su parte, la organización de defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA) apuntó en su momento que el Ayuntamiento de Mieres debería dar a conocer los índices de siniestralidad que presentan los cruces regulados por semáforos con radares. Esta plataforma puso en duda que la implantación del polémico «foto rojo» en una ciudad como Mieres tenga algún tipo de incidencia positiva en materia de seguridad.

La continuidad del «foto-rojo» no se pone en cuestión. En cuanto el Ayuntamiento adquiera un nuevo dispositivo lo activará de nuevo.

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